Un total de 34 mujeres de la provincia víctimas de la violencia machista está en riesgo «medio» y sólo en un caso es «alto», según los datos del Ministerio del Interior recogidos a través del sistema de seguimiento integral en los casos de violencia de género.

La provincia de Ciudad Real registró el primer semestre del año un total de 4.192 casos de violencia de género, 3.549 figuraban en el capítulo de inactivos, es decir aquellos que por determinadas circunstancias «se consideran que temporalmente no es preciso que sea objeto de seguimiento y protección», aunque en cualquier momento «puede reactivarse».

No obstante, según los datos de Interior, sólo el 15 por ciento de los casos de violencia de género registrados en la provincia de Ciudad Real entre enero y junio están activos, o lo que es lo mismo, «son objeto de seguimiento y protección», según se recoge en el informe del sistema de seguimiento integral en los casos de esta naturaleza. En situación de espera solamente hay uno en la provincia de Ciudad Real, es decir pendiente de realizar alguna actuación o de completar algún tipo de información.

En cuanto al riesgo, además de las 35 víctimas consideradas que están en peligro medio y una alto, hay otras 192 que están expuestas en menor medida, según el citado observatorio en el que figuran 415 más «sin riesgo apreciado».

En estas últimas semanas han muerto siete mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas, 44 en lo que va de año. Un semestre y un verano cruento, aunque la provincia por fortuna se está librando.

Según el fiscal encargado de los asuntos de violencia doméstica, en la provincia no han aumentado los casos de malos tratos con respecto al año pasado.

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