La Policía Local de Ciudad Real presentó ayer un nuevo radar láser portátil a raíz de la campaña de control de velocidad iniciada por la Dirección General de Tráfico (DGT) el pasado lunes. Con este dispositivo, según la Policía, se busca disuadir a los conductores de alcanzar velocidades más altas de lo que se permite en ciertas zonas, de modo que los conductores deberán levantar el pie del acelerador a partir de esta semana si no quieren verse sorprendidos por multas.

Este nuevo radar, o ladar (radar láser), permitirá a la Policía medir la velocidad a la que circulan los vehículos con un escaso margen de error, en torno a los dos kilómetros por hora, acoplado en coches de la Policía oficiales o camuflados, o en trípodes. Otra característica de este instrumento es que puede controlar la velocidad de los vehículos que circulan en ambos sentidos y de todos los carriles de la vía. Además, el radar tiene un alcance mínimo de 60 metros, pudiendo llegar a superar el kilómetro en condiciones óptimas de visibilidad y es capaz de realizar las mediciones en tres décimas de segundo.

En la presentación del nuevo dispositivo, el concejal de Régimen Interior y Seguridad Ciudadana, David Serrano, explicó que se utilizará el radar «en lugares en donde han detectado que se sobrepasa la velocidad permitida», aunque no se avisará de su ubicación. La intención es intentar dar respuesta a las quejas de los ciudadanos que residen en esas zonas. Por otro lado, se tratará de limitar los excesos de velocidad en las franjas horarias de mayor riesgo, con la finalidad de prevenir accidentes y hacer que se respete la velocidad máxima.

Por su parte, el superintendente de la Policía Local, Fernando Díaz Rolando, admitió que este radar se utilizará sobre todo en las rondas y en las avenidas de entrada a la ciudad, donde más se sobrepasan los límites, establecidos en 50 kilómetros por hora. También ha advertido que no sólo se trata de una medida disuasoria, sino que con este radar pueden sancionar los delitos contra la seguridad pública, como es la conducción temeraria a altas velocidades.

Eso sí, según las cuentas del Ayuntamiento de Ciudad Real, ninguna de las 24 colisiones ocurridas en el término municipal de la capital fueron consecuencia de excesos de velocidad de los vehículos implicados. De otra forma, los accidentes más se localizan generalmente en las rotondas, en 15 de las 24 colisiones. Además, hubo tres colisiones por cambiar de carril de circulación sin ceder preferencia, un atropello en paso de peatones por no respetar el conductor del vehículo el semáforo en fase roja, un atropello de vehículo a bicicleta y dos colisiones por alcance al estar los vehículos detenidos en semáforo o cruce.

El Ayuntamiento de Ciudad Real también anunció que se unificará el criterio por el que los radares se activan. La tolerancia está de estos dispositivos en los siete kilómetros por hora hasta los 100 kilómetros por hora, mientras que en límites superiores a esa velocidad, los radares actuarán a partir que se supere el máximo en un siete por ciento. Por su parte, la Policía recuerda que, para evitar denuncias, lo mejor es no pasar por alto las prohibiciones.

La presentación de esta radar coincide con el inicio de la campaña de la Dirección General de Tráfico de control de velocidad que se extenderá hasta el domingo, 26 de julio, en cumplimiento de la programación de las Operaciones Especiales de vigilancia y control. Esta iniciativa tendrá especial incidencia en carreteras convencionales y vías urbanas y responde a que la consideración de la velocidad como factor de riesgo no ha adquirido el nivel de aceptación entre los conductores que ya tienen otras conductas, como el consumo de alcohol y el uso del cinturón o casco.