Emiliano García-Page fue proclamado ayer formalmente candidato a revalidar la Presidencia de Castilla-La Mancha. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reunió este sábado en Fuenlabrada, feudo del socialismo madrileño, a la cúpula del partido en el primer Comité Federal desde que accediera a La Moncloa en el mes de junio para oficializar las candidaturas autonómicas para las elecciones del próximo mes de mayo.

El dirigente regional admitió que este acto supone «el pistoletazo de salida a la campaña electoral» para el partido ya que desde el punto de vista orgánico se da «formalidad» a las decisiones que se han dado en los distintos territorios.

El presidente autonómico puso en valor el trabajo realizado en estos tres años y medio en aquellas comunidades en las que se produjo el cambio de gobierno aunque reconoció que «queda camino por hacer» por lo que llamó a que esas autonomías en las que ya gobierna el PSOE «empujemos para que se consolide la iniciativa del cambio»que comenzó en 2015, esta vez con el acuerdo del Gobierno de España.

García-Page puso en valor que en estos territorios «nos hemos dedicado fundamentalmente a revertir y a recuperar todo lo que se destrozó con los Gobiernos del PP», para volver a conquistar el estado de bienestar que, según dijo, el PSOE ha ido construyendo desde los años 80.

Pedro Sánchez había convocado a sus líderes territoriales para el Comité Federal en un acto claramente de precampaña electoral. «Afortunadamente» valoró Page, «este comité tiene poco que ver con otros que ha vivido el PSOE» recordó, con el que se ha dejado atrás «los malos momentos de conflicto interno» que supusieron en el pasado «muchas heridas» para la organización.

Page no acudió al Comité, como tampoco lo hizo Susana Díaz, de Andalucía, Guillermo Fernández Vara, de Extremadura, o Javier Fernández, de Asturias. Algo a lo que quiso restar importancia con un «llevamos una agenda de locos» poniéndose como ejemplo al afirmar que «ayer llegamos a las tres de la madrugada de Ciudad Real», alegó a los medios de comunicación a su llegada al cónclave socialista.

Sobre Cospedal

Durante su interveción en el acto de proclamación de candidatos, en el que García-Page se enorgulleció de poder dirigirse a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, destacó que en estos tres años y medio se ha dedicado a hacer lo que la gente de la región le pidió: «Que hiciera lo contrario que Cospedal», como revertir los recortes y recuperar los derechos. Y dadas las últimas informaciones aparecidas está quedando claro, según manifestó, que «en los despachos y en mi vida privada hago también lo contrario que Cospedal».

Precisamente sobre las supuestas contrataciones de Método 3 por parte de la ex presidenta autonómica para investigar a la Junta de Comunidades en la etapa de José María Barreda, Page consideró que «cuando alguien es mala persona con los ciudadanos, lo es incluso con los compañeros de su partido» por lo que estimó estas actuaciones como «la manifestación de la política más sucia».

«Casado puede mirar para otro lado y pensar que acaba de llegar, pero ya era portavoz de un partido al que defendió desde su cargo haciendo las mismas cosas por las que ahora van a tener que rendir cuentas» lanzó al tiempo que acusó a Cospedal de ser las dos caras de la misma moneda, con un método A consistente en «recortes y más recortes», y un método B con «este tipo de manejos y métodos absolutamente corrompidos en el ámbito político que tiene que tener consecuencias».