Libros antiguos de medicina hacen historia en la región

D.F.
-

Ángel Pozuelo, historiador y bibliotecario del Hospital General Universitario, investiga obras de los siglos XI al XVI en Ciudad Real, Toledo, Cuenca y Alcaraz

El bibliotecario del Hospital General de Ciudad Real y doctor en Historia Ángel Antonio Pozuelo Reina, cree que trabajar entre libros antiguos es una ocasión de hacer «descubrimientos maravillosos», que le ha permitido conocer los avances médicos de la edad media y el renacimiento e incluso un autor del siglo XVI, Juan Sánchez, que se adelantó en su explicación de la circulación de la sangre a Miguel Servet.

Pozuelo, que ayer impartió en la Biblioteca Pública la conferencia ‘Literatura médica de Castilla-La Mancha, medieval y renacentista’, explicó que ha centrado su estudio en la región por la sorpresa que le produce la llegada que gentes de otros lugares que «me vengan a explicar la historia de mi tierra».

Su trabajo parte de un estudio de las obras, «del momento histórico en que se escribieron, porque la clase médica tiene que estudiarse en el tiempo, en el que sea, junto a la política, la economía, pero sobre todo con la sociedad».

En este sentido, Pozuelo entiende su trabajo como «una aportación humanística» a la formación de los médicos de la actualidad, pues conocer cómo se trataron las enfermedades en el pasado puede ayudarles en el presente.

El bibliotecario centró su conferencia en seis médicos de la región que escribieron libros, Ibn Wafid, toledano en los siglos X y XI; que compartía origen con Al Coatti, algo posterior; Alonso Chirino, médico conquense de Juan II en el siglo XV, quien también ejerció en Ciudad Real; Los Sabuco, Miguel y Oliva, padre e hija de Alcaraz; y Juan Sánchez Valdés de la Plata, los tres del siglo XVI, los primeros de Alcaraz y el último de Ciudad Real, cuya obra está en toda Europa.