Sally, ciudadrealeña de adopción, aunque nacida y criada en Paraguay, fue finalmente la subcampeona de la tercera edición del concurso de TVE 'Masterchef'. Su contrincante en la prueba definitiva, el talaverano Carlos, con el que mantuvo una deportiva rivalidad durante toda la serie fue muy superior en el último programa al ofrecer una versión de sus platos elaborados con una técnica depurada y una propuesta más arriesgada frente al planteamiento algo más tradicional de Sally. Con esta actuación, la ciudadrealeña ha conseguido como premio la matrícula en un máster de cocina dulce y pastelería de restaurante en el Basque Culinary Center.

Por su parte, Carlos conquistó a un jurado de lujo al que en este programa contó con el refuerzo de Ferrán Adriá, Joan Roca y Andoni Luis Aduriz, además de los ya habituales Pepe Rodríguez, Samanta Vallejo-Nájera y Jordi Cruz.

«Has cocinado unos platos impecables, llenos de tradición y modernidad. Son arriesgados y pretenciosos pero has aplicado un buen criterio. Chapó», valoró el jurado al probar el menú del ganador, compuesto por un bocadillo de calamares con pan de tinta, merluza con ajo negro y huevas y torrijas con pan brioche y frutos rojos.

Sally al final del programa reconoció con deportividad la victoria de Carlos que durante todos los programas ha sido un duro rival y que en la prueba de fuego fue superior. Los miembros del jurado destacaron también los profundos conocimientos de cocina que tiene Sally, así como la personalidad y sabor con que consigue cada plato.

En este último programa los concursantes estuvieron acompañados por sus familiares así como por los que fueron sus competidores en las distintas entregas del certamen. Para los espectadores de TVE fue todo un descubrimiento la espontaneidad de Mey, la hija de la Sally, a quien acompañaba su padre Joaquín.

El tercer puesto del programa fue para la joven catalana Andrea, de la que los jueces destacaron su actitud a pesar de cometer algunos errores durante la cita. El cuarto concursante y primer eliminado de la final fue el sevillano Antonio, de quien el jurado consideró que le pudieron los nervios.