La mejora económica que ha sucedido a la recesión que durante años ha azotado con fuerza en todos los ámbitos ya ha llegado a las familias, que parecen haber heredado de la crisis una cultura del ahorro que está ayudando a hacer más amplio el colchón que los particulares ciudadrealeños tienen en los bancos. Así lo muestran al menos las cifras del Banco de España a las que ha tenido acceso La Tribuna, que elevan por encima de los 8.400 millones de euros al cierre de 2017 los ahorros provinciales en depósito en las sucursales bancarias, una cifra no alcanzada hasta la fecha, después de haber repuntado un 3,8 por ciento en tan sólo un año. Ese crecimiento, que hasta ahora se producía a costa de un menor endeudamiento, convivió durante el año pasado con un ligero incremento en los créditos vigentes en la provincia, lo cual muestra que esa cultura ahorradora se combina con un cierto grado de inversión.Ese ahorro, además, está diversificándose. No se trata de un pasivo inmovilizado en las cuentas bancarias sino de un dinero que empieza a moverse por figuras de ahorro e inversión más sofisticadas. Es lo que explica Carlos Martín, director territorial de Banca Comercial de Liberbank, que reconoce que la mejoría económica que se inició hace un par de años «está llegando a las familias, porque ese traslado no es inmediato», y que es posible que la dureza de la crisis «haya hecho que las familias tengan una mayor cultura del ahorro, tanto para imprevistos como para planificar su futuro, con el fin de que no vuelva a suceder algo como lo que pasó hace una década y coja a muchos desprevenidos».Las cifras del Banco de España elevan por encima de los 8.405 millones de euros los depósitos de los ciudadrealeños en sus cuentas de ahorro, tanto en vista como en plazos.