El Barcelona conquistó ayer la Supercopa de España al ganar 2-1 al Sevilla gracias a un espectacular gol del francés Ousmane Dembélé a 12 minutos del final y un penalti parado por Marc-André Ter Stegen en el tiempo de descuento. 

Pablo Sarabia adelantó al Sevilla a los nueve minutos, Gerard Piqué igualó a los 42 minutos y Dembélé dio al Barcelona su primer título de la temporada con un gran disparo antes de que Ter Stegen resolviera definitivamente el choque. 

El encuentro, disputado en la ciudad marroquí de Tánger, fue el esperado para dos equipos todavía cortos de forma y sin el ritmo propio de los partidos de alto nivel. Sobre todo en el caso del Barcelona. 

El Sevilla estaba de estreno con el técnico Pablo Machín, quien está intentando imponer un esquema de tres centrales y dos laterales largos, un dibujo que todavía precisa ajustes.