Control y contención, plan de CLM para la Xylella Fastidiosa

N.S.
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La Consejería de Agricultura tiene un Plan de Contingencia contra la temida bacteria que hace hincapié en la prevención, e insiste en que no se ha producido ningún caso en la comunidad

Aunque en Castilla-La Mancha no se ha producido ningún caso de Xylella Fastidiosa, la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural tiene activo un Plan de Contingencia contra el temido asesino silencioso que arrasa los campos del Mediterráneo.

Se trata de medidas que ya están funcionando y han sido redactadas por la Dirección General de Ganadería y Agricultura, dentro de las acciones que se desarrollan en aspectos de sanidad vegetal, y que van encaminadas, según la información a la que ha tenido acceso La Tribuna, al control de la bacteria para impedir su aparición y en caso de aparecer, actuar con rapidez y eficacia para su erradicación.

El documento define la bacteria como «principal amenaza fitopatológica para cultivos estratégicos de la comunicad» como la vid, el olivar o el almendro e implica una estrategia basada en prospecciones en zonas situadas cerca de lugares de riesgo. Así, y según la información facilitada por Agricultura, en lo que va de año se han realizado inspecciones visuales en los alrededores de zonas de alto riesgo en donde existen los vegetales que pudieran tener esta bacteria. Estos lugares son: zonas demarcadas, en alrededores de viveros y centros de jardinería y vías de comunicación con las zonas demarcadas.

Además, están programadas para este año una serie de prospecciones mínimas en la región, alrededor de 400, en plantaciones comerciales de CLM.

Debido a los focos aparecidos en Madrid y en Alicante, también se llevaron a cabo prospecciones específicas incrementando el nivel en función de la proximidad de esos casos a la región castellano-manchega. La bacteria se detectó en Italia en 2013 de allí pasó a Francia, Alemania y finalmente a España. El primer brote fue en Baleares en 2016 y un año más tarde se confirmó su presencia en Alicante.

En el caso de esta bacteria, la principal medida de control fitosanitario «debe ser extremar las precauciones en cuanto al comercio del material vegetal sensible y especialmente procedente de zonas con presencia de la bacteria». Así, y según recoge el plan de contención, este material vegetal «debe proceder siempre de productores oficialmente autorizados y con pasaporte fitosanitario en su caso».