El año 2018 comenzó en la provincia de Ciudad Real con el primer repunte en materia de empleo público desde el año 2010, después de que la Junta, la Universidad regional y los ayuntamientos hayan incrementado sus plantillas en el último año, al tiempo que el Estado suma ya seis ejercicios consecutivos adelgazando sus nóminas. El crecimiento del empleo público se sostiene en la ampliación de las plantillas de docentes y profesionales sanitarios por parte del Ejecutivo regional, pero sobre todo se cimenta en un repunte sustancial en los empleados de los ayuntamientos y las corporaciones locales, que suman más de 10.500 empleados públicos, una cifra que no se alcanzaba desde el año 2011. De esta forma, la provincia de Ciudad Real superaba a principios de este ejercicio los 33.000 funcionarios y empleados públicos, un 7,2 por ciento más que en enero de 2017 y la que es la cifra más alta para un inicio de ejercicio desde el año 2012.

Las cifras recogidas por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas a las que ha tenido acceso este diario muestran el primer crecimiento en las plantillas al servicio de las administraciones desde hace ocho años, cuando el número de empleados públicos creció un 4,6 por ciento en 2010 para alcanzar las 36.599 personas. Desde entonces, coincidiendo con lo más duro de la crisis, políticas como la reducción al mínimo (incluso eliminación) de la tasa de reposición o la falta de oposiciones y convocatorias de ofertas de empleo público habían ‘condenado’ a las administraciones a un descenso paulatino de personal que se mantuvo durante siete ejercicios consecutivos, hasta reducir las plantillas de funcionarios y empleados públicos hasta las 30.939 personas en enero del año pasado. Esa tendencia a la baja se ha roto. Un notable repunte en la plantilla de los ayuntamientos y el incremento experimentado por las incorporaciones de docentes y personal sanitario a la nómina del Gobierno regional han acabado con el descenso paulatino del empleo público y devuelto las cifras de funcionarios a las del inicio del año 2012.

En la actualidad, según el Ministerio de Hacienda, las administraciones públicas cuentan con 33.191 trabajadores en la provincia de Ciudad Real. Para el Estado trabajan hasta 3.932 personas, más de un 2 por ciento menos que el año pasado y rebajando por primera vez la cifra por debajo de los 4.000 empleados públicos del Ejecutivo central en la provincia desde el año 2009. Es la única administración que ha reducido su personal en Ciudad Real, pese a que el Gobierno regional también ha aligerado el número de nóminas que trabajan en la administración general, una caída de apenas el 0,8 por ciento (pasando de los 2.257 trabajadores de 2017 a los 2.239 del inicio de este año) que se ha visto compensada por los incrementos en sanidad (7.399 trabajadores, un 1 por ciento más que en 2017) y en educación (7.736 empleados públicos, un 3,7 por ciento más), dos de las competencias transferidas a las autonomías.

corporaciones locales. Pero si hay una administración que ha contribuido a romper la tendencia a la baja en el empleo público en la provincia es la de las corporaciones locales. Por primera vez desde 2012, los ayuntamientos han superado la cifra de 10.000 empleados públicos, después de que sus plantillas se hayan incrementado en un 21,6 por ciento en el último ejercicio, pasando de los 8.687 trabajadores que contabilizaba el Ministerio de Hacienda en enero de 2017 a los 10.567 que registra en la actualidad, la cifra más alta para un mes de enero desde el año 2011, cuando la crisis empezaba a hacer estragos.

También ha incrementado su plantilla en el último año la Universidad regional, que según Hacienda contaba con 1.318 trabajadores (un 10,7 por ciento más) al inicio del presente año.