Cita festiva e ineludible para el sector del vino castellano-manchego que ayer se vistió de gala para acudir a la entrega de los premios a la calidad de los vinos embotellados con Denominación de Origen La Mancha, en su 27 edición, celebrada en la sede de la Interprofesión, en Alcázar de San Juan.
Una edición marcada por la «gran variedad» de las bodegas premiadas, en las cuatro provincias que conforman el Consejo Regulador, demostrando una «calidad creciente y gran competitividad en la búsqueda de nuevos mercados». De hecho, la calidad es la vocación fundamental de las bodegas manchegas, como mencionó el director general de Infraestructuras y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Miguel Cervantes. «Se trata, con premios como estos, que siga estimulandose la calidad y la profesionalidad que es la única forma de competir en los mercados internacionales», remarcó Cervantes, coincidiendo con el primer edil alcazareño, Diego Ortega, quien señaló que los vinos manchegos «están compitiendo con cualquier otra Denominación de Origen de España y de Europa o del mundo, y con este tipo de premios se viene a reconocer todo ese trabajo que hay detrás, por parte de las bodegas», destacó.
PREMIOS. En la variedad de airén, el ganador fueron Bodegas Asociadas Cooperativas, de Alcázar de San Juan, y Bodegas Ayuso, de Villarrobledo (Albacete). En la categoría de verdejo ganó la Cooperativa Nuestra Señora de La Muela, de Corral de Almaguer (Toledo), mientras que los premios en Oro, fueron para Bodegas Hermanos Rubio, de Villasequilla (Toledo), y Vinícola de Castilla, de Manzanares.
Los blancos premiados en solitario fueron los de Bodegas César José Velasco; Bodegas Dominio de Punctum, en Las Pedroñeras (Cuenca); Bodegas Muñoz, Noblejas (Toledo); y Bodegas Altovela, de Corral de Almaguer (Toledo).
En la categoría de rosados: Vinos SAT Coloman de Pedro Muñoz, la Cooperativa Nuestra Señora De Rus, de San Clemente (Cuenca); Garnacha de Bodegas Isla, de Villarta de San Juan; Vinícola de Tomelloso; Cooperativa Oleovinícola Campo de Calatrava, de Bolaños de Calatrava; y Bodegas Martínez Sáez, de Villarrobledo (Albacete).
En los vinos tintos varietales fueron ganadores la Cooperativa San Antonio Abad de Villacañas, (Toledo); César José Velasco, Villarrobledo (Albacete); Bodegas Bogarve 1915, de Madridejos (Toledo); García Carrión La Mancha, de Damiel; la Cooperativa Nuestra Señora de Criptana, de Campo de Criptana; y Cooperativa Nuestra Señora de la Piedad, de Quintanar de la Orden, (Toledo).
En coupage, los primeros premios fueron para Félix Solís, en Puebla de Almoradiel (Toledo); Bodegas Alcardet, de Villanueva de Alcardete (Toledo); y la Cooperativa Cristo de la Vega, de Socuéllamos
Para los tintos envejecidos en barrica, el mejor vino manchego se elaboró en la cooperativa Nuestra Señora de Criptana, de Campo de Criptana. Idéntico premio conseguieron, respectivamente Bodegas Alcasor, Noblejas (Toledo); Bodegas Pago de la Jaraba, Villarrobledo (Albacete) y Vinícola de Castilla, de Manzanares (Ciudad Real).