Un payaso triste con un fondo de edificios de una ciudad que se doblan como si fueran de goma y una nube azul que tiende a derretirse saluda a los conductores que siguen la calle Guadiana en Ciudad Real, en dirección a Puertollano. Donde hasta ahora sólo había una anodina caseta de Gas Natural Fenosa de simple ladrillo visto, el artista ciudadrealeño Ángel Alberto (Gela) López plantea «una imagen sencilla, fácil de comprender y que dignifique el grafiti» y que poco a poco acabará por cubrir también los tres muros restantes.

Gela empezó el pasado martes a transformar esos cuatro muros de tono rojizo en una superficie de expresión artística, como ya hizo anteriormente con otras dos casetas situadas en el parque de Gasset y junto a una zona infantil en el Torreón. Le aguardan en torno a una veintena de casetas que la empresa eléctrica tiene repartidas por todo el término municipal de la capital.

Para realizar este trabajo, el artista recibe el importe de los materiales que emplea, pero tanto su mano de obra como la de eventuales ayudantes con los que pueda contar es gratuita. «Lo hago porque quiero que el grafiti se vea como una arte normal», comenta.