Álvaro Urquijo considera que los 40 años que su banda, Los Secretos, cumple este año de presencia en el mundillo musical, «es el fruto de una serie de casualidades». En un arranque de sinceridad confiesa que en aquel 1978 «no pensábamos ni tan siquiera dedicarnos profesionalmente a la música», al tiempo que su propio padre «no sabía mucho que es lo que hacíamos, porque lo llevábamos todo en secreto, de ahí el nombre». La idea que le empujaba era «hacer un par de conciertos, sacarnos esta espinita y ya está». El siguiente será el miércoles en la plaza Mayor de Ciudad Real, a partir de las 19.00 horas, en un espectáculo programado por la Junta de Comunidades para conmemorar las cuatro décadas que cumple la Constitución Española.

Pero ocurre muchas veces, «una cosa llevo a la otra y cuando te quieres dar cuenta ya no sabes cuánto tiempo llevas». De esta forma, Urquijo reconoce que «no he tenido nunca la sensación de decir vamos a hacer un proyecto bien medido, para dentro de dos años o de cuatro, en absoluto; todo ha ido sobre la marcha, haciendo conciertos, componiendo canciones, sacando discos…».

El líder de Los Secretos matiza que en España no hay costumbre de que las formaciones musicales alcancen una larga vida en común.

En su caso, tuvo una breve experiencia en solitario tras la que se reintegró a la banda, «yo aprendí la lección», comenta. «En el año 98 hice un disco en solitario y me di cuenta de que vale mucho más un grupo, que tiene vida propia, con un sonido peculiar, que todos nos apoyamos y nos ayudamos», sentencia.

Para el líder de Los Secretos, el resultado de un grupo de música «es lo mejor de cada uno», puesto que en su opinión, «no necesariamente tiene unos componentes muy brillantes, pero aún así sacan 100 por 100 de sus capacidades».

Al mismo tiempo recuerda el caso de los Rolling Stones, donde cualquiera de sus componentes son auténticos iconos de la interpretación de sus instrumentos, «pero siguen juntos, cada uno tiene su estilo de tocar, pero tienen la idea de que en conjunto se toca mejor».

En cuanto a la actuación del próximo día 5, el músico la define como «un concierto de celebración», que parte de una investigación «sobre cuáles son nuestras canciones más queridas», para lo que se han valido de información «de las plataformas de streaming o de las redes sociales como Youtube que pueden darte una información un poco más precisa». Otras de sus técnicas fue dirigir preguntas a sus seguidores en diferentes plataformas para conocer detalles como la canción que llevaban más tiempo sin escuchar o cuáles se habían hecho sonar más veces a lo largo de una vida».

Urquijo precisó que una decena de las canciones que forman parte del espectáculo «forman parte de las que la gente quiere tener en la cabeza». De esta forma el repertorio será «un recorrido por todas décadas que hemos estado tocando».

El líder de Los Secretos anuncia: «Si cumplimos ese criterio de agradar al público, de devolverle el favor por el que grupo lleva 40 años en carretera y haciendo discos». Urquijo vuelve al principio de la conversación cuando señala que a pesar de no haberlo planeado así, «he pasado más tiempo de mi vida siendo músico de una banda que otra cosa, y eso de agradecérselo al público», y es por tanto la justificación de la gira.

A pesar de tan larga trayectoria, el vocalista de la banda asegura que «ahora estamos en el mejor momento de nuestra trayectoria y nunca hemos tenido tanta difusión», apunta.

Al mismo tiempo, marcó distancias con «esos músicos que reniegan de su propia historia», a pesar de que ha tenido multitud de experiencias.

Con una trayectoria tan larga, el músico ha sido también testigo excepcional del cambio tan sustancial que ha experimentado el mundo de la música y su relación con los medios de comunicación. Los Secretos nació cuando la línea de la actualidad la marcaban programas de radio y televisión que hoy han sucumbido a un criterio mercantilista y en cambio la línea la marcan las redes sociales.