Los familiares y vecinos del sacerdote pasionista Antonio Rodríguez, padre 'Toño', volvieron a reunirse ayer en la plaza de España de Daimiel por quinto domingo consecutivo para pedir la puesta en libertad del religioso, que se encuentra detenido en las dependencias de la División Antinarcóticos de la policía de El Salvador desde el pasado 29 de julio, cuando fue acusado de un presunto delito de agrupación ilícita y de introducir objetos ilícitos en los penales salvadoreños en los que se encuentran los pandilleros.

La familia aseguró que el sacerdote «continúa medicado» después de que a principios del mes de agosto abandonara dependencias policiales durante unos días para ingresar en una clínica, donde fue tratado de un posible ataque de ansiedad. Carmen, la madre del sacerdote, espera que, tal y como aseguró el fiscal general de El Salvador en La Tribuna, la audiencia especial que se ha solicitado al Juzgado Especializado de Instrucción de Santa Ana «se fije para esta semana», y el sacerdote «pueda quedar en libertad». Sobre la veracidad o no de esa inculpación que el fiscal atribuye al padre 'Toño', la familia prefiere «esperar a ver cómo se desarrolla todo, y dentro de un tiempo se sabrá la verdad».

La de ayer fue la quinta concentración para pedir la libertad del padre 'Toño'. Sobre el ambiente de la plaza de España, en la que se reunieron alrededor de un centenar de personas, estaban las declaraciones de Luis Martínez, fiscal general de El Salvador, en una entrevista concedida a este medio, en la que llegaba a asegurar que no había tenido relación con el sacerdote.

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