Empate de ley

Alemoy
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Un tanto de Juanma Ortiz con el tiempo cumplido, al aprovechar el rechace de su propio lanzamiento de penalti, otorga al Socuéllamos un punto con sabor muy dulce (1-1)

Juanma Ortiz celebra el gol abrazado por sus compañeros. / - Foto: PABLO LORENTE

Hay un dicho no escrito que dice que todo se ve dependiendo del prisma con el que se mira. Es lo que, según las opiniones, ha podido suceder en el estreno en el Paquito Jiménez del Yugo UD Socuéllamos en Segunda División B. Aunque el equipo rival tenía enfrente a un ‘señor’ rival, con experiencia, jugadores y planteamiento acorde con la categoría, los de Ángel García Cosín se vaciaron hasta el último minuto y más allá, para rescatar un punto sumado a base de ganas, pundonor, empuje y buen fútbol durante muchos minutos, sobre todo en la segunda parte, haciendo pequeño a su rival.

El Fuenlabrada, que sabía a lo que venía a un campo de reducidas dimensiones, que sabía el rival que tenía enfrente, en ningún momento se achicó, ni por el campo ni por una afición incondicional que en todo momento ha estado apoyando a su equipo, pese que durante muchos minutos, por no decir todo el partido, estuvo por debajo en el marcador, pero que nunca perdió la fe en lograr un resultado que hiciera más que justicia a lo visto en el terreno de juego.

Tal vez el partido de ayer haya servido para que los aficionados del Yugo UD Socuéllamos tomen conciencia de que el equipo ya no está en Tercera División, que ésta es una categoría superior, un paso por encima de lo acostumbrado a ver en el Paquito Jiménez, y enfrente estaba un Fuenlabrada con experiencia, habituado a la categoría, que le da igual el tipo de rival al que se enfrenta porque tiene muy claras las cosas y sabe lidiar con circunstancias externas al ser un ‘fijo’ en Segunda B. Además, los madrileños cuentan con mimbres, en este caso jugadores que saben de qué va esto del fútbol. Pachón, Carlos Martínez, Raúl Aguilar, Tello, San José, Javi Barral o Borja Pérez están un escalón por encima en una categoría desconocida para un equipo como el blanquiazul, y así lo demostraron durante algunas fases del juego.

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