Cruz Roja de Alcázar de San Juan realizó un balance de 2017 «orgullosa de sus 380 voluntarios», tal y como puso de manifiesto Conchi Herrera, presidenta de la entidad. Por su parte, la concejala Patricia Benito destacó la ayuda municipal de 124.145 euros que recibe esta ONG. «Tenemos la responsabilidad de maximizar tanto su confianza como los recursos que se nos ponen en las manos y en un ejercicio de transparencia, dar a conocer los resultados y una visión global de la implantación de Cruz Roja en la ciudad», expresó su máxima responsable. En concreto, Cruz Roja atendió a 466 mayores y 281 personas desempleadas, en lo que representa «el capítulo que con más orgullo llevamos a cabo». Del total, apostilló Herrera, un 30%, 66 parados, encontraron un puesto de trabajo. En este punto, subrayó la participación de las empresas a través de unas jornadas de sensibilización empresarial, donde se puso de manifiesto el beneficio social que pueden llevar a cabo. En el ámbito de las personas en situación de extrema vulnerabilidad, Cruz Roja ofreció kits de higiene infantil y alimentos y facilitó el pago de agua, luz y alquileres en coordinación con el área de Servicios Sociales. En el apartado de discapacidad, la ONG llevó a cabo proyectos de transporte avanzado, productos de apoyo, como el préstamo de sillas de ruedas o camas articuladas, además de otro tipo de actividades para proporcionar una mejor accesibilidad de las personas. El baño adaptado en silla anfibia, que se realiza en las lagunas de Villafranca, «es muy satisfactorio también, con una intervención a 155 personas de la localidad». Cruz Roja también atendió el pasado ejercicio a ocho mujeres víctimas de la violencia de género y 48 reclusos en la prisión de Alcázar. En formación, se instruyeron a un total de 1.840 personas a través de distintos cursos, como el de dirección y dinamización de actividades juveniles. En total, se realizaron 95 cursos a lo largo de 2017. Y también destaca la implicación de la ONG en materia de medio ambiente y salud.