Pese al golpe anímico que supuso la amplia derrota a manos del FC Barcelona B, Javier Márquez y su jugador Manu Díaz Mata se han encargado de dejar claro que «seguimos creyendo en nosotros, que podemos llegar», en palabras del técnico manzanareño, que apelaba al clásico dicho de que «mientras hay vida, hay esperanza».En ese mismo sentido se expresaba el jugador malagueño, que precisamente el domingo se enfrentará al que fue su equipo hace dos temporadas: «Aún quedan muchos puntos en juego y vamos a seguir luchando hasta el final». Una 'final' que se podría perder el capitán Juan Lumbreras por unos problemas en el hombro.