El Vestas BM Alarcos conquistaba por primera vez El Pandero de Palma del Río (23-27) y, con estos dos puntos, asaltaba la segunda plaza, adelantando al Barça B, y ampliaba a cinco su renta con el primer equipo fuera de los puestos de fase de ascenso a Asobal, el Cisne. Una posición idílica para los hombres de Javier Márquez, que sin despegar los pies del suelo, no se ponen techo y siguen mirando de cerca al único equipo que les antecede en la clasificación, un Nava al que tienen a cinco puntos, con un partido menos jugado por los de Ciudad Real.
Y es que la racha de los alarquistas es espectacular. Encadenan ocho jornadas sin perder (seis victorias y dos empates) y su última derrota data del 17 de noviembre, cuando cedían ante el Nava. Dos meses y medio en los que sólo se han escapado dos puntos, los de los empates en las pistas del Novás y Villa de Aranda.
Pero la plantilla del Vestas Alarcos quiere más. Este domingo (12 horas) recibe a un crecido Agustinos Alicante, la jornada siguiente visitará la pista del Bordils y una semana después recibirá al Cisne gallego. Tres compromisos vitales y, en teoría, asequibles, tras los que llegarán tres exámenes mucho más exigentes ante Zamora, Puerto Sagunto y el líder Nava.