El Almagro tiene un objetivo muy claro esta temporada: convertir el Manuel Trujillo en un campo inexpugnable. Tras el pasado curso, donde sólo se firmaron cinco victorias en casa y se perdieron ocho encuentros, el equipo encajero recibe este domingo al Villarrobledo dispuesto a hacerse fuerte.  

El entrenador del Almagro, Kiko Vilches, señala que «nos medimos a uno de los favoritos, viene un equipazo que ha mantenido el bloque y ha sumado a gente importante. Combinan muy bien y será difícil hacerles daño», aunque el triunfo pasará por «meter mucha intensidad al partido y estar al 200%». 

El punto conseguido el pasado fin de semana en el campo del Atlético Albacete (1-1) mantiene el pulso competitivo de un Almagro que, una vez recuperado de la derrota inicial ante el Tarancón, mira hacia la parte alta de la tabla. Ante el Villarrobledo, una prueba de altura para mostrar el potencial rojillo y sobre todo en un Manuel Trujillo que espera  disfrutar con un triunfo. 

Giti y Santos no podrán jugar por lesión, así como Diego Prado, baja de larga duración.