Se trata de una demanda que llega tras dos años de negociaciones con la entidad sin que haya sido posible obtener la dación por la cantidad de documentos que se solicitan, algunos que no están redactados dentro del código de buenas prácticas, según expuso el integrante de la plataforma José Luis Huertas.

Los afectados son una familia en la que el padre tiene una pensión de invalidez y siete hijos pero actualmente no residen en la vivienda hipotecada a la espera de que se produzca dicha dación en pago. El segundo caso es un hombre que en ala búsqueda de trabajo se ha trasladado a Bilbao por lo que tampoco utiliza la vivienda. 

La plataforma ha denunciado que la respuesta de la entidad ha sido solicitar la venta de los inmuebles, pero desde la plataforma consideran que esto solo haría aumentar la deuda de las viviendas.