La Guardia Civil de Ciudad Real investiga un posible caso de violencia de género tras hallar a un matrimonio muerto en su vivienda de la calle San Isidro de la localidad de Manzanares. Ella, de 50 años, apareció con un golpe en la cabeza, y el marido, de 48, ahorcado en la misma vivienda.
Las primeras hipótesis de la investigación se encaminan a que puede tratarse de un homicidio y posterior suicidio del autor por ahorcamiento, por lo que sería un caso de violencia de género. Ambos eran naturales de Manzanares y tenían dos hijos varones mayores de edad. Según la Delegación del Gobierno, el matrimonio se encontraba en proceso de separación y no había denuncias previas, ni antecedentes de malos tratos.
El hecho consternó a los vecinos y al propio alcalde de la localidad, Antonio López de la Manzanara, quien mostró su extrañeza a La Tribuna por lo ha acontecido: «Era gente del pueblo y muy conocida. Aunque se desconocía que tuvieran problemas».
Los vecinos de las casas colidantes aseguraron no haber escuchado nada y los pocos que en la tarde de ayer se acercaron hasta la vivienda relataron que «era un matrimonio muy normal y muy trabajador». Él era pintor, comentaron, y ella limpiaba varios portales y una gestoría, añadió una ciudadana. Reyes, que vive a la vuelta de la vivienda del matrimonio, coincidía mucho con el marido en la calle a la hora de sacar al perro. «Por las mañanas me encontraba con él, nos juntábamos y nos saludábamos. Era una persona sencilla y muy normal, aunque muy mal tendrían que estar para hacer todo esto».
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