«La financiación no va a ser un problema», había augurado el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de Castilla-La Mancha momentos antes del inicio de la «reunión informal» a la que habían sido convocados los consejeros del ramo por parte del ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, para la financiación de los nuevos tratamientos para la hepatitis C como único punto en el orden del día.
Y así fue, ya que los consejeros habían sido citados para exponerles el acuerdo alcanzado entre Sanidad y Hacienda para que las comunidades autónomas puedan financiar esos medicamentos en unas condiciones «sin parangón», como las calificó el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, que también estuvo presente en este encuentro.
«Las comunidades autónomas vamos a ser capaces de financiar estas nuevas terapias», señaló José Ignacio Echániz, a pesar de que «a ninguna nos sobra el dinero», por lo que valoró con satisfacción este acuerdo. «El Gobierno ha hecho un gran trabajo, ha cumplido su responsabilidad y ahora es el momento de las comunidades autónomas» dijo, que deberán desarrollar los sistemas de información «para conocer todas las caras de la enfermedad», además de organizar toda la asistencia necesaria para el tratamiento y atención de los pacientes con hepatitis C.
Con este acuerdo, Echániz destacó el hecho de que España se convierte en «pionera» porque los pacientes tendrán los mejores tratamientos «sin tener que pagar un solo céntimo de euro, y eso no ocurre en ningún país del mundo en estos momentos», subrayó.
Eso es posible ahora gracias al acuerdo que permite aprovechar los fondos de financiación a comunidades autónomas para financiar los tratamientos, devolviendo el dinero a 10 años, a tipos de interés del 0%, en 2015 para las comunidades adheridas al FLA, y también en 2016 y 2017 para las adheridas a la Facilidad Financiera. Pero además se dan otras ventajas como la incorporación de mecanismos que reducirán el precio de los medicamentos en función del volumen, es decir, a más tratamientos el precio se irá reduciendo; también se dará una reducción del precio si en algún país de la Unión Europea es más bajo; y se establece el criterio de «riesgo compartido» que implica que si los tratamientos dispensados por los laboratorios no son eficaces los pagarán las compañías farmacéuticas.
Este Plan establece que deben recibir los nuevos antivirales, en primer lugar, los pacientes con fibrosis moderada a grave (F2, F3 y F4), además de los F1 en algunas circunstancias, lo que supone alrededor de 52.000 personas en este país.
¿Sovaldi en Venezuela? «Siempre aparecen nuevas patologías y nuevas moléculas en la Sanidad española, y siempre buscamos márgenes para darle respuesta» apuntó, «y esta vez no va a ser distinto». Eso sí, no le faltó al también secretario de Sanidad y Asuntos Sociales del Partido Popular la crítica al gobierno anterior por la situación en la que, a su juicio, dejó a la Sanidad. «España inició 2011 con una deuda sanitaria de 16.000 millones de euros», por lo que el montante destinado de 727 millones de euros para el pago de los nuevos tratamientos «ahora no seríamos capaces de afrontarlos si no hubiéramos resuelto el problema que dejó Zapatero».
Pero más duro fue con «algunos partidos populistas» de los que criticó el mensaje «lamentable y preocupante para los pacientes» que habían lanzado en los últimos días, para preguntarse a renglón seguido «si en Venezuela hay tratamientos de esta naturaleza».