Por primera vez en las cinco campañas que lleva entrenando a equipos sénior, Andrés Viñas no podrá dirigir a sus jugadores desde el banquillo este domingo por sanción. Y el motivo de este castigo es realmente sorprendente. El Juez Único de Competición reflejó en su resolución «la tardanza de sus futbolistas en salir del vestuario para la revisión del equipamiento, siendo el tercer retraso injustificado que se produce en la presente temporada».

Viñas se enteró de la sanción a través de un jugador «y me quedé perplejo. No me lo esperaba. No sé adónde vamos a llegar. No creo que empezar un minuto antes un partido sea una cuestión primordial o determinante», explicaba ayer.

Es más, el técnico del Calvo Sotelo recuerda que en algunos desplazamientos las expediciones visitantes también han tenido que esperar a que los colegiados se duchen y terminen de redactar el acta. «A veces tenemos por delante un viaje de vuelta de más de tres horas y el lunes los jugadores tienen que madrugar para irse a trabajar, pero nos toca esperar a que los árbitros acaben y no pasa nada», recuerda el preparador puertollanero, que prefiere pasar página «y asimilarlo».

Eso sí, confiesa que le da mucha rabia que la primera vez que ha sido sancionado como entrenador sénior haya sido por este motivo.