La Motilla del Azuer y el Parque Nacional de Las Tablas fueron los dos recursos turísticos, que aúnan naturaleza e historia, con los que Daimiel se presentó en la 35º edición de Fitur, desntro del espacio destinado a Castilla-La Mancha. También mostró su intención de cerrar el triángulo con los atractivos propios de la ciudad de calado cultural, gastronómico y lúdico. «El objetivo es presentar lo que hoy por hoy es una realidad», precisó el alcalde de la localidad, Leopoldo Sierra, quien se interesó por el funcionamiento del stand daimieleño.
El regidor municipal acompañó junto a sus homólogos de Ciudad Real al delegado de Gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y a la Consejera de Turismo, Antonio Lucas Torres y María del Carmen Casero, respectivamente, durante la presentación del Día de la Provincia, donde se expuso la «riqueza de la provincia» y, dentro de ella, también hubo lugar para el parque nacional y el paso de Santa Teresa por Daimiel.
Sierra aprovechó para manifestar que, un año después de la apertura de la Motilla del Azuer, el balance es «altamente satisfactorio». Este enclave abrió sus puertas el 26 de abril con unas jornadas de puertas abiertas para daimieleños para después operar a través de la web www.motilladelazuer.es, desde la que se gestionan las visitas del público en general, tanto individuales como grupales. El respaldo, según Sierra, es «unánime». El recorrido «se va adaptando a las necesidades que se van advirtiendo», explicó, gracias a lo cual se ha posicionado como «uno de los mejores rincones con encanto», como se pudo comprobar en la competición organizada por la Guía Repsol, en la que la Motilla quedó en quinta posición de 17.
Por todo ello, considera «fundamental» seguir «apostando» por el sector turístico, con el objetivo de «liderar el turismo de la comarca», aseveró. Para ello, el patrimonio natural que suponen Las Tablas y el histórico, como el yacimiento, «pueden colocar a Daimiel como punta de lanza de un turismo de interior basado en dos líneas: fin de semana con ese doble encanto y visitas de escolares de lunes a viernes». «A partir de ahí, nuestra ciudad conforma ese tercer pilar que nos sirve para incentivar un sector que debe crecer simultáneamente insuflando alternativas a la economía local», prosiguió.
A esta inyección de visitantes contribuyen iniciativas como la que se presentó ayer en Fitur, Hinomaru La Mancha, cuyo responsable es Yoshiko Okumoto. El objetivo es «fusionar turismo e interculturalidad gracias a cinco rutas temáticas por la provincia que compartirán visitantes españoles y japoneses», según explicó. Okumoto, guía turística, junto a Destinos Manchegos, representada en el acto por Jesús María Pozuelo, organizan rutas de fin de semana orientadas, cada una de ellas, a un tipo de turismo concreto. La idea es evitar que La Mancha sea «una tierra de paso» para favorecer «una visita más pausada».
Sierra comprobó en Fitur, acompañado por el coordinador Servicio Periférico Consejería de Empleo y Economía, Federico Céspedes, el interés por el turismo de la ciudad. Asimismo, asistieron medio centenar de daimieleños acompañados por la concejal ade Turismo, Soledad Torrijos.