Las horas extraordinarias son una de las herramientas que tienen las empresas para regular su actividad a las necesidades de producción de cada momento sin tener que recurrir al mercado para ampliar plantilla. En un territorio abonado a la pequeña y mediana empresa y en el que uno de cada tres empleos dependen de manera directa de los autónomos, que suman con sus altas y las de sus asalariados en torno al 30 por ciento de los cotizantes en vigor en la provincia de Ciudad Real, las horas extraordinarias recaen en muchas ocasiones en los propios responsables de las empresas, pero esa circunstancia no evita pensar en los puestos de trabajo que podrían crearse a partir de ese sobresfuerzo de los trabajadores. En concreto, en la provincia, más de 1.600 empleos por las 65.200 horas extra que hacen los trabajadores ciudadrealeños de media cada semana, según la última Encuesta de Población Activa, y 600 de esos empleos son suplidos por horas extraordinarias