Acabar con una victoria y un bronce merece la pena». Así arengaba ayer Manolo Cadenas a los ‘Hispanos’. El técnico ya sabe lo que es dirigir a España en el trance que afrontará hoy (14.30 horas / Teledeporte). La actual campeona del mundo tiene la opción de volver a subir a un podio, tercero de forma consecutiva en grandes citas. Un premio suficientemente importante para que los jugadores patrios pasen página tras la amarga derrota con Francia.  

España quería estar en la final. Como cualquier deportista. Casi todos querían ser los protagonistas hoy en el Lusail Hall. 24 selecciones comenzaron el pasado 14 de enero el campeonato del mundo de Qatar con la intención de luchar por un título al que ya solo aspiran Francia y la sorprendente anfitriona. Al resto le gustaría, al menos, pelear por el bronce. Y el bloque nacional tiene esa opción ante Polonia. Ganó el Mundial de 2013, se subió al tercer escalón del podio en el Europeo de 2014 y hoy tiene la oportunidad de conseguir, de nuevo, una presea.

Tocados en lo anímico y magullados en lo físico (sobre todo, Viran Morros, que acabó recibiendo varios puntos de sutura cerca del ojo en un hospital y con un buen corte en la lengua; y Cañellas, con tres kilos menos desde que arrancó este Mundial), los ‘Hispanos’ saben que el bronce siempre lo gana quien antes supera las derrotas en semifinales.

La selección española perdió el pasado viernes, tras una inmaculada competición, ante su ‘bestia negra’ en las últimas citas de relumbre, la escuadra gala, en un partido marcado por su mala primera parte defensiva y por la polémica arbitral en la segunda, cuando los de Cadenas levantaban la cabeza.

Su rival ahora será Polonia, conjunto que fue de menos a más hasta que se topó con Qatar. Con dos derrotas en la fase de grupos, ante Alemania y Dinamarca, superó a Suecia y Croacia en octavos y cuartos, pero no pudo con los de Valero Rivera. Aún se mantienen en la retina los irónicos aplausos de sus jugadores a los colegiados tras su derrota en semifinales.

En este tipo de encuentros apenas valen las estadísticas ni las últimas referencias entre ambos. España se impuso a Polonia (33-28) en el Memorial Domingo Bárcenas de Oviedo, en la antesala de este Mundial, en un encuentro dominado por los visitantes durante casi 50 minutos y resuelto en 10 a favor del cuadro local. «Hay alguna diferencia, sobre todo porque aquel era un partido de preparación, pero seguro que nos puede ayudar», matizó el seleccionador.

El rival de esta tarde sigue comandado por su portero Szmal, capaz de amargar a cualquiera si tiene un buen día; el lateral izquierdo Michal Jurecki y el ex del Ciudad Real Jurkiewicz, que aquí hace de central. Su seleccionador, Michael Biegler, seguro que echará de menos a Lijewski, baja tras los primeros partidos. La mayoría de sus jugadores son de sobra conocidos para Manolo Cadenas, ya que tres militan en su club, el Wisla Plock; y otros cinco en su principal rival, el Vive Kielce. «Ellos también nos conocen», indicó.

Si el premio ya es suculento, un bronce en el Mundial, hay que añadirle un extra. El ganador, siempre que Francia se haga con el oro, se garantizaría organizar uno de los torneos preolímpicos para los Juegos de Brasil en abril de 2016.