El Juzgado Contencioso-administrativo número 2 de Toledo ha condenado al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) a indemnizar con más de 132.680 euros a la viuda y a los dos hijos de un vecino de Valdepeñas que murió de un infarto en su puesto de trabajo una hora después de que un facultativo del centro de salud le hubiera diagnosticado un dolor sin importancia.

Según la sentencia, a la que ha tenido acceso La Tribuna, el hombre acudió al centro de salud el 30 de junio de 2008 aquejado de un fuerte dolor en el pecho y en el brazo izquierdo. Se le realizó un electrocardiograma que «mostró signos de isquemia subepicardiaca septal baja, compatible con inicio de infarto agudo de miocardio y de infarto lateral alto no transmural antiguo, y, sin embargo, el facultativo comunicó al paciente un juicio diagnóstico de dolor músculo-esquelético y no derivó con urgencia al paciente al ámbito hospitalario». Pasada una hora y diez minutos de que abandonara el centro de salud, el paciente sufrió un infarto agudo de miocardio y murió durante su traslado al hospital.

 En la demanda interpuesta por el abogado Felipe Holgado en representación de los familiares de la víctima, se reclamaban 193.000 euros en concepto de indemnización al Sescam y a la compañía aseguradora Zurich por la atención sanitaria defectuosa que recibió su marido y padre.

La sentencia estima que al interpretarse erróneamente el electrocardiograma se perdió la oportunidad de aplicar un tratamiento a la víctima pero entiende que la muerte «no tuvo su causa directa en la asistencia sanitaria dispensada, sino que se debe a la propia patología cardíaca padecida por el fallecido». En este sentido, la magistrada aplica también la teoría de la pérdida de oportunidad para determinar la indemnización a percibir por la viuda y los dos huérfanos, que establece en función de las estadísticas de mortalidad global del infarto en España y, según la misma, entiende que se perdió un 70% de oportunidad de salvación, el mismo porcentaje que estima sobre la cantidad solicitada por los demandantes.