El jurado popular encargado de juzgar en la Audiencia Provincial de Guadalajara el cuádruple crimen de Pioz en agosto de 2016 ha condenado culpable a Patrick Nogueira de las muertes de sus tíos y de los hijos de estos, de 1 y 4 años, todos ellos de nacionalidad brasileña.
Tras prácticamente dos días de deliberación, los nueve miembros del jurado popular salieron pasadas las ocho de las noche para declarar a Nogueira culpable de «haber dado muerte» a cuatro miembros de su familia «intencionadamente».
Unos asesinatos realizados con intencionalidad, ensañamiento con los menores y sin considerar ninguna circunstancia eximente, tal y como dice el veredicto que el jurado entregó a la magistrada, Elena Mayor.
Ahora será el tribunal el que dicte la sentencia, imponiendo las penas pertinentes al acusado. Ante este veredicto, Nogueira podría enfrentarse a prisión permanente revisable, la pena solicitada por el fiscal y la acusación particular. Sería la cuarta persona en España en enfrentarse a esta polémica sentencia.
Una deliberación accidentada. No hay que olvidar que la deliberación comenzó en la mañana del pasado viernes y que el jurado le entregó a la magistrada ese mismo día una primera versión del acta del veredicto, pero ésta se lo devolvió por «falta de motivación» en algunas de las respuestas. Hecho que obligó a los nueve miembros del jurado a volver a deliberar durante prácticamente toda la jornada del sábado.
Este ha sido uno de los crímenes más mediáticos de la última década, situando a Guadalajara en las portadas de los diarios nacionales. El 17 de agosto de 2016, en el número de la urbanización La Arboleda de Pioz, se cometía este cuádruple crimen y un mes después el hedor sacaba a la luz cuatro cadáveres. Dos niños de 1 y 4 años y sus padres, estos últimos descuartizados.
En las seis sesiones que ha durado este juicio se han escuchado a testigos, peritos y letrados, visualizado la reconstrucción del cuádruple crimen de Pioz, y oído los macabros whatsapps que el asesino confeso compartió en tiempo real con su amigo brasileño Marvin, mientras planeaba y ejecutaba la muerte de sus tíos y primos menores.