La decisión se adopta una semana después de que se ordenara el abandono de los pisos y de que días más tarde, tras un primer informe, concretamente el pasado domingo, se valorase que 26 de las familias podían regresar a sus casas, no así las 18 restantes, en cuyos pisos había grietas mayores o se situaban cerca de la escalera donde origen del problema. Sin embargo, si bien inicialmente se habló de un «tema de asentamiento» en una de las escaleras centrales, un fallo estructural que se podría resolver en poco tiempo. Y se decidió que algunos inquilinos podían regresar a sus pisos. Sin embargo, los nuevos estudios técnicos realizados a medida que se avanzaba con estos trabajos desvelan un problema mayor que requiere una obra de mayor envergadura, una actuación integral.Ayer se convocó a los vecinos a una reunión para informarles de la decisión y de que los trabajos al ser de mayor envergadura, van a necesitar más tiempo y conviene que el edificio esté vacío.