Cuidar a los que cuidan

H. L. M.
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La Asociación de Familiares de Alzheimer es una de las entidades de la región que ofrece formación a familiares que cuidan a dependientes

En la pantalla del aula del centro de respiro Alöis de Ciudad Real se puede ver una reflexión sobre las alucinaciones que puede tener una persona afectada por ciertas patologías asociadas a la edad o a patologías neurológicas. El psicólogo de la Asociación de Familiares de Alzheimer (AFA), Jesús Herreros, es el encargado de exponer los casos y su público son diez mujeres que  van debatiendo lo que indica Herreros en la teoría con lo que ven en la práctica, en su casa. Ellas componen uno de los dos grupos ya creados dentro del Plan de Formación Cuidando a quienes Cuidan, una iniciativa novedosa, creada por la Consejería de Bienestar Social y dirigida a formar a las personas que perciben la Prestación Económica para el Cuidado en el Entorno Familiar (Pecef), una medida dentro de la ley de dependencia que ofrece una ayuda económica a quienes se ocupan de cuidar a su familiar en casa.

El Pecef es una de las medidas más concretas de la dependencia, solo 123 personas reciben esa prestación en Ciudad Real en el grado 3, el máximo, y la idea de Afa es formar a 40 personas a través de este curso que se celebra en sus instalaciones. De momento cuenta ya con dos grupos, de diez personas cada uno, que se irán ampliando en las próximas fechas.»Se ofrecen  20 horas de formación en 10 sesiones de dos horas cada uno finalizaremos el 18 de diciembre», comenta Herreros, quien apunta a lo complicado que resulta cerrar algunos grupos si se piensa que se trata de hogares donde los dependientes son el centro familiar, donde existen hogares que llevan años sin vacaciones, sin descanso sin un respiro.

Por este motivo cuando se aborda esta formación sobre el cuidado de estas personas las palabras claves son «actitud» y «motivación», de cara a evitar que al final el cuidador padezca algún problema.  «Son clases teóricas y prácticas donde se abordan síntomas que tienen los familiares, el cuidador,  como la sobrecarga que implica tener una persona dependiente en casa día tras día». La intención a través de estas clases es coger una serie de herramientas y dotar al cuidador de medidas para mejorar su atención.

Herreros es el profesor de un grupo muy heterogéneo de cuidadores. En el que hay familiares de personas dependientes entre los edades 15 y los 100 años y que tienen patologías que pasan por los efectos tras un ictus, como la parálisis cerebral, el autismo o simplemente la edad. «El objetivo es que se enriquezcan de la experiencia unos de otros», indica Herreros. «El grupo es homogéneo» por lo tanto en cuanto a las necesidades que presentan en sus casas, aunque tienen peculiaridades como por ejemplo esa persona que tiene a su madre con 100 años y que cumple 101 el 20 de enero como dependiente.

Existen elementos comunes en estas personas que cuidan de dependientes como son «la soledad del cuidador y la sobrecarga emocional de tener un familiar en casa las 24 horas». «Todos los cuidadores y personas necesitamos un respiro para hacer cosa de las más básicas y si no hay nadie que te ayude no podrías ni ir a comprar» recuerda el psicólogo, de ahí la necesidad de aportar pautas a estos cuidadores. «Intento explicar desde el punto de vista teórico que hay situaciones que ellos las viven habitualmente y que ocurren naturalmente», indicó Herreros.

Herreros recordó que aún es pronto para conocer el futuro de estas iniciativas y que se incluyen dentro del Servicio de Promoción de la Autonomía Personal (Sepap) una serie de medidas enfocadas a  retrasar el agravamiento de la dependencia y a permitir que las personas vivan el máximo tiempo posible en sus casas. «Es la primera vez que se hace y es totalmente innovador y estamos probando», indica el psicólogo, quien recuerda que él ve motivación en todos sus alumnos, que todavía no han faltado a clase. «Se enriquecen los unos de los otros», argumenta Herrero, mientras escucha los comentarios de sus estudiantes sobre las alucinaciones y cómo lo viven ellos en casa.