El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, ha pedido a los castellano-manchegos que extremen las precauciones cuando salgan al campo para evitar nuevos incendios. Así lo hizo tras los fuegos declarados durante el pasado fin de semana en la Sierra Norte de Guadalajara, en cuya extinción han colaborado afortunadamente la lluvia y la bajada de temperaturas. Sin embargo, esta semana van a volver a subir las temperaturas en toda la región «y tenemos que extremar las precauciones».
No en vano, advirtió Labrador, los dos incendios de Guadalajara han estado originadas por negligencias o imprudencias humanas, «y eso podemos evitarlo entre todo; hay incendios que no se pueden evitar, pero los que podemos evitar, debemos evitarlos entre todos». En concreto el fuego de Cogolludo se originó en una cosechadora, mientras que el de Bustares se declaró mientras se realizaban labores apícolas.
El delegado del Gobierno hizo estas declaraciones ayer por la mañana, cuando en Cogolludo ya se había declarado el nivel cero, aunque seguía en nivel dos el de Bustares (afortunadamente a última hora de la jornada los dos fuegos estaban estabilizados y a nivel cero de alerta). A pesar de las buenas perspectivas, Labrador insistió en la precaución ante la nueva subida de temperaturas que prevén los servicios de meteorología. Además, destacó el trabajo de coordinación de todos los medios aéreos y terrestres del Ministerio, Diputación y distintas comunidades autónomas. «Se ha realizado un trabajo de coordinación excepcional, que esperemos que pronto permita que los incendios sean un mal recuerdo», afirmó.
En nivel de alerta cero
Siguen sin estar controlados al 100%, pero los dos incendios que llevan asolando Guadalajara desde finales de la semana pasada ya están en nivel de alerta cero. De hecho, se ha notado esta rebaja de la magnitud del fuego en los medios empleados, que ayer se redujeron, aunque también se contó con cinco medios aéreos y con un número de medios terrestres que a última hora de la jornada superaban los diez, así como más de 50 trabajadores. Los dos fuegos alcanzaron un perímetro de 3.100 hectáreas el fin de semana, aunque en todo momento se ha destacado que hay zonas dentro de ese perímetro que no han sido dañadas. En los primeros días incluso tuvieron que evacuar a más de un centenar de vecinos.