Centenares de vecinos de numerosos municipios de la provincia de Ciudad Real salieron ayer a la calle para mostrar su repulsa hacia una de las peores lacras de la sociedad actual: la violencia machista. Los ayuntamientos se sumaron a la conmemoración del Día Internacional contra la Violencia de Género con la organización de diferentes actos.

Un gran lazo de color violeta colgó ayer del balcón del Ayuntamiento de Daimiel. Con él, la Administración local mostró su rechazo al maltrato. Fue la puesta de largo a un acto organizado por la Concejalía de Mujer en el que participaron numerosos vecinos y una amplia representación de estudiantes. Todos ellos, además de apoyar a la causa con su presencia, pudieron plasmar durante la mañana sus mensajes de apoyo a las víctimas y de rechazo a esta lacra mediante unas manos de papel dispuestas para la ocasión donde quedaban reflejadas anotaciones espontáneas al respecto. Un símbolo que quedó soldado en el mural expuesto junto al Consistorio.

Valdepeñas celebró en el centro cultural La Confianza el acto institucional. Comenzó con una pieza instrumental de piano, para dar paso a la lectura de un manifiesto consensuado en el Consejo Local de la Mujer y una mesa redonda de expertos en violencia machista. Al acto asistió el alcalde de Valdepeñas, Jesús Martín, que hizo hincapié en que «en la medida que nos sensibilicemos, todo esto se va a corregir o diezmar mucho a lo largo del tiempo».

En Miguelturra aprovecharon la ocasión para constituir la Comisión Técnica de Seguimiento del Protocolo Local de Intervención contra la violencia de género. Un órgano con el que se pretende garantizar una atención integral a las víctimas de violencia de género. En la actualidad hay 25 expedientes abiertos, por eso se reclamó la colaboración de todos los sectores implicados, unos en prevención y otros en actuación. Este trabajo diario se pondrá en común al menos dos veces al año.

Almagro también volvió a decir «no» a la violencia de género. Marian Ureña, en nombre de la Corporación municipal, leyó el manifiesto elaborado por el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha en el que se compromete a trabajar para que «el tratamiento de la violencia de género sea objeto de un gran Pacto de Estado por una sociedad segura y libre de violencia machista».

Por la tarde, los actos de rechazo contra la violencia de género continuaron en la plaza Mayor con una actividad que consistió en pintar zapatos de rojo en forma de repulsa hacia la violencia por las 48 mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas en lo que va de año.

tolerancia cero. La localidad de Almadén también mostró su rechazo ante la violencia hacia las mujeres a través de una concentración que reunió a decenas de personas en la céntrica plaza de la Constitución. Alumnos de los institutos de Secundaria Pablo Ruiz Picasso y Mercurio, junto al alcalde, Siro Ramiro, dieron lectura a un manifiesto en el que pidieron que la sociedad «tome conciencia del problema», y en el que alentaron también a la ciudadanía a que «no mire para otro lado y no tolere en nuestro entorno ninguna situación de violencia, sexismo o discriminación hacia las mujeres».

También se organizaron actos de repulsa hacia la violencia machista y en homenaje a las víctimas de esta lacra social a las puertas de otros consistorios como los de Bolaños, Calzada y Malagón. En esta última localidad se guardó un minuto de silencio que finalizó con un aplauso y la suelta de globos en memoria de todas las mujeres que han muerto como consecuencia de la violencia de género y por las que la están sufriendo en la actualidad.