El Vestas BM Alarcos ha vivido una semana muy especial, en la que los acontecimientos le han obligado a echar la vista tres años atrás y recordar aquella inolvidable primera fase de ascenso a Plata disputada en Irún. El lunes conocía que se volverá a cruzar con el Bidasoa, su verdugo en la semifinal de Artaleku, en la segunda ronda de la Copa del Rey; y este domingo se las verá con el equipo ante el que disputaba y perdía la final de consolación, el Palma del Río (12.30 horas, Quijote Arena). 

Un partido en el que el equipo de Javi Márquez, reforzado en su moral tras superar la previa copera en Villa de Aranda, intentará apelar al factor pista para sumar dos nuevos puntos. Se lo perderá seguro Fran Vidal, mientras que no las tienen todas consigo los renqueantes James Parker, Josh da Silva y Javi de la Cruz.

Sí estará ya disponible José Javier Candeleda, que en Copa ya estuvo siete minutos en pista después de más de dos semanas en el dique seco por un esguince de rodilla. El domingo debutará en Liga. «Fueron siete minutos que me costaron bastante, porque el estar dos semanas parado se hace notar en las piernas», reconoce el pivote extremeño. ‘Cande’, que celebra el haber podido ganar a domicilio ya esta temporada, aunque sea en Copa del Rey, no olvida que más importante aún es hacerse fuertes en el Quijote Arena: «No nos podemos dejar puntos en casa. Ganar al Palma del Río sería un golpe moral muy fuerte para nosotros».

El conjunto cordobés, que también seguía adelante en Copa, es el actual líder de la División de Honor Plata.