El curso escolar 2018-2019 ha comenzado en el colegio público San Isidro de Daimiel con total normalidad, aunque el aspecto del centro no sea el más agradable a la vista debido a la paralización de las obras de reforma que se estaban acometiendo desde hace unos meses para mejorar sus antiguas instalaciones. Así lo subraya la directora del colegio, Rocío Rubio, que confía en que los trabajos se reanuden en las próximas semanas, ya que los «trámites» que está llevando a cabo la Consejería de Educación «van más rápidos de lo esperado inicialmente». De hecho, Rubio asegura que las obras de la primera fase se reiniciarán «a finales de septiembre o principios de octubre», tal y como le trasladaron desde el departamento que dirige Ángel Felpeto, que decidió paralizar los trabajos a finales de julio y rescindir el contrato con la empresa adjudicataria por «impagos» a los proveedores. Una anulación contractual que pasó a la vía judicial, lo que retrasó aún más todo este proceso. Debido a los precedentes, la directora del ‘San Isidro’ prefiere no aventurar plazos, pero calcula que las obras de la primera fase, que contempla la construcción de un nuevo aulario de Educación Infantil y un aula de psicomotricidad en la zona donde se encontraban las conocidas como ‘casas de los profesores’, «no acabarán antes de Navidad». Inmediatamente después dará comienzo la segunda fase, ya adjudicada y  consistente en la rehabilitación de dos edificios, uno de ellos con más de 80 años de historia y que se destinará a servicios comunes. El objetivo, «adaptarlos a las exigencias educativas del siglo XXI». La primera fase se adjudicó por algo más de 537.000 euros y la segunda contaba con un presupuesto superior al millón de euros. Con independencia del retraso en la finalización de las obras, Rocío Rubio hace hincapié en que lo importante es que el proyecto ya está presupuestado y adjudicado en el marco del Plan de Infraestructuras Educativas de Castilla-La Mancha 2015-2019, por lo que, antes o después, se dará respuesta a una «reivindicación histórica» de la comunidad educativa del colegio San Isidro.