Desaconsejan el cigarrillo electrónico como alternativa para dejar de fumar

Raquel Santamarta
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Patricia Mata, neumóloga de la Unidad de Deshabituación Tabáquica del HGUCR, afirma que «lo único que se sabe por el momento es que contiene sustancias tóxicas que es mejor evitar»

Una mujer da una calada a un cigarrillo electrónico. / - Foto: PABLO LORENTE

Sanidad y las comunidades autónomas han llegado a un acuerdo para regular el cigarrillo electrónico, un producto que se ha puesto muy de moda entre aquellos que quieren dejar de fumar echando, en lugar de humo, vapor por la boca. Una opción para dejar atrás el hábito tabáquico, todo un clásico en la lista de propósitos cada comienzo de año, que, sin embargo, los expertos desaconsejan. «No forma parte de nuestro tratamiento para abandonar el tabaco», asegura la neumóloga Patricia Mata desde la Unidad de Deshabituación Tabáquica del Hospital General Universitario de Ciudad Real (HGUCR).

Y es que, además de contener sustancias tóxicas, no ayuda al fumador a superar su dependencia psicológica al no romper con el hábito de «llevarse algo a la boca». En cuanto a la física, cabe recordar que algunos de ellos contienen nicotina, un componente que engancha seis veces más que la heroína, además de glicol de propileno (una sustancia sintética que absorbe el agua), glicerina vegetal, nitrosaminas (compuesto cancerígeno) y otros productos como esencias de menta, vainilla y manzana.

La prohibición de su uso en colegios y zonas educativas, hospitales y centros de salud, administraciones, servicios de atención al ciudadano y transporte público será a partir de 2014 un hecho aunque su consumo sea distinto al del tabaco tradicional al no exigir caladas continuas, sino esporádicas. Cabe recordar que los cigarrillos electrónicos no se consumen ni se queman, sino que se recargan con un líquido, una batería y un atomizador.

Patricia Mata, sorprendida de que haya hasta tiendas especializadas en su venta, admite que de la docena de pacientes que ven por semana en la Unidad de Deshabituación Tabáquica del HGUCR no son precisamente pocos los que echan mano de este artilugio para intentar dejar atrás el hábito. «Hay gente a la que le ayuda a conseguirlo, como la hipnosis; pero no está demostrada su eficacia ni sus efectos a largo plazo», pone de relieve, incidiendo en que «lo único que se sabe por el momento es que contiene sustancias tóxicas que es mejor evitar».

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