Técnicos de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en concreto de la Consejería de Educación y Cultura, inspeccionarán en los próximos días la parte de la muralla que se derrumbó esta semana en el Castillo de Peñarroya, en el término municipal de Argamasilla de Alba, para tratar de elaborar un informe en el que se recojan las posibles causas del derrumbe de la pared que protege la Torre del Homenaje del castillo y para detallar las posibles actuaciones que se han de llevar a cabo para proceder a su restauración. Así lo confirmaron a La Tribuna fuentes de la Consejería, que explicaron también que deben dilucidar, tras la realización de ese informe, si llevar a cabo las actuaciones de reparación del muro del castillo corresponde al Gobierno regional o al municipio. En un principio, algunas hipótesis apunta al crecimiento natural de una higuera como causa de la aparición de grietas en la pared, debilitada luego por las lluvias.
Respecto a la responsabilidad de las actuaciones a desarrollar en la muralla, el alcalde de Argamasilla, Pedro Ángel Jiménez, recuerda que el castillo es «un Bien de Interés Cultural (BIC), así que tenga quien tenga que llevar a cabo las actuaciones, necesita el consentimiento expreso de Patrimonio, de la Junta de Comunidades». La parte de la muralla que se vino abajo, confirma el regidor, «es la que protege la Torre del Homenaje», y asegura que después de advertir al Gobierno regional acerca del deterioro «que percibimos ya en el mes de abril y retieramos después», cree que lo fundamental «es evaluar los daños y restaurar la muralla cuanto antes».

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