La Policía Nacional llevó a cabo ayer el desalojo de las tres familias que ocupaban los dos bajos de un bloque de viviendas situado en la calle Alonso Céspedes de Guzmán, en la barriada del hospital de la capital ciudadrealeña. El desalojo se llevó a cabo después de que, durante la mañana de ayer, se registraran dos denuncias sobre la ocupación ilegal de estos dos inmuebles vacíos, y se saldó con la identificación e imputación policial de las tres familias, tal y como confirmaron a La Tribuna fuentes policiales.

Fueron los vecinos del inmueble los primeros en levantar la voz a raíz de una ocupación que se produjo a finales de la pasada semana. En los dos bajos, propiedad de la constructora del bloque de viviendas, se habían instalado un número indeterminado de personas sin autorización, y en las quejas se incluían molestias por ruidos. La protesta vecinal se produjo el martes, y durante ese día los propietarios de los inmuebles no presentaron denuncia acerca de la ocupación, como explicaron fuentes policiales, pero durante la mañana de ayer se registraron dos, una por cada una de las viviendas. A pesar de la identificación policial y el desalojo de las tres familias que ocupaban los inmuebles, la constructora mantenía durante el día de ayer la seguridad privada que dispuso en el recinto.

más casos. Según pudo saber La Tribuna, la ocupación de los dos bajos en la calle Alonso Céspedes de Guzmán no es la única que se ha producido en la ciudad en las últimas semanas, incluso meses. La Comunidad de Propietarios de un inmueble situado en la Ronda del Carmen denunció ayer la ocupación de locales comerciales de la planta baja por parte de personas «que hacen allí sus necesidades e incluso encienden hogueras, con el riesgo que eso supone».

Además, y según fuentes consultadas por este medio, hay al menos dos casos más de ocupación ilegal de inmuebles vacíos en la capital, en un bloque de la carretera de la Fuensanta y en otro situado en la calle Giraldo de Merlo de Ciudad Real.