Cantaba Carlos Gardel que es «un soplo la vida, que veinte años no es nada». Pero esas dos décadas han sido las que han convertido al Hospital Mancha Centro de Alcázar de San Juan en un centro sanitario de referencia en la región y en todo el país, asentado su presente y su futuro en su inicio como modesto hospital comarcal. El centro alcazareño fue el último que se construyó como parte del antiguo Insalud y a sus consultas recién construidas arribaron, hace 20 años, jóvenes médicos que pusieron todo su empeño en sacar adelante un proyecto que se ha ido haciendo grande con el paso del tiempo. Inmenso. Buena prueba del crecimiento del hospital es su servicio de Oftalmología, que sirve como espejo para comprobar la evolución de una instalación que cumple veinte años recordando el pasado con un único objetivo: seguir creciendo en el futuro.
El servicio de Oftalmología del Mancha Centro tiene una trayectoria que habla por sí sola. Más de sesenta premios jalonan la labor de unos profesionales que han sido reconocidos incluso en el extranjero, llegando a colocar la bandera del centro alcazareño en países como Estados Unidos y Alemania. Han formado parte de los comités directivos de las sociedades científicas del ramo más importantes en el país, y su influencia en la región es indudable. El Hospital Mancha Centro fue el primero en realizar un trasplante de córnea en Castilla-La Mancha, en 1997, y el pasado año completó hasta 44 operaciones de este tipo. Cuenta con un Banco de Ojos y ha sido impulsor de algunas de las principales técnicas quirúrgicas en el campo de la oftalmología. Un gran pasado que augura un gran porvenir.

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