El geólogo ciudadrealeño Pedro Rincón Calero ha descartado la relación entre el terremoto que se registró el lunes y cuyo epicentro se situó en Ossa de Montiel (Albacete) y la técnica de fracking, lo que llegó a calificar como «una auténtica estupidez porque nadie ha hecho nada de fracking», dijo frente a quienes señalan la posible vinculación del seísmo con esta técnica para posibilitar o aumentar la extracción de gas y petróleo del subsuelo mediante la perforación de pozos e inyecciones en el terreno.
Este doctor en Ciencias Geológicas, del Grupo GeaPraxis Ibérica, añadió que «ni están acabadas las investigaciones» respecto al fracking y que, por lo tanto, aún deben «encontrar el material que están buscando» y en la proporción adecuada para realizar los sondeos, algo para lo que se deberán conceder las autorizaciones necesarias y, además, «será algo público». Asimismo, matizó que, en el caso de que se llevara a cabo, podría generar «microsismidad, pero no un terremoto de la magnitud de 5,2 grados», razón por la que afirmó que la vinculación entre el seísmo y el fracking es «una salvajada y demagogia».
En el mismo sentido se pronunció el Colegio de Geólogos, que definió de «irresponsable» relacionar el terremoto de Albacete con el fracking «porque puede se puede confundir a la opinión pública si se asocia el seísmo de Ossa de Montiel con los futuros proyectos de fracturación hidráulica en la zona». «No hay ninguna implicación, el terremoto es un fenómeno natural; no se puede manipular a la población», defendió el presidente del Colegio de Geólogos, Luis Suárez.
Por su parte, el coordinador provincial de IU, Miguel Ramírez, avanzó que su formación se sumará a la petición de los ecologistas para que se anulen las licencias de fracking en dicha zona al «tener unos riesgos sísmicos evidentes que pueden provocar unos episodios de contaminación en los acuíferos 23 y 24, y que son el soporte de una buena parte de la agricultura de toda La Mancha, principalmente de Ciudad Real, Albacete y Cuenca».
En cuanto a las causas del terremoto, el geólogo Pedro Rincón se refirió a un estudio del proyecto ABCO que apunta a una zona de fractura entre las localidades de La Roda y Moral de Calatrava con la intersección con otra entre Villarrobledo y el Campo de Montiel, del mismo modo que vinculó la sismicidad con el volcanismo de Calatrava y con las distintas zonas de agua que hay en la provincia. Todo ello, dijo, permiten localizar las zonas sismogenéticas de Ciudad Real y, a su juicio, se debería tener en cuenta de cara a la organización de los territorios.
Por otra parte, se refirió a las réplicas que se han registrado (casi 50) y comentó que en el caso del seísmo de 2007 de Pedro Muñoz, «duraron un par de meses».
Por su parte, el subdelegado del Gobierno en la provincia, Fernando Rodrigo, afirmó que «afortunadamente, no hubo que lamentar daños personales ni materiales» e hizo hincapié en que la Guardia Civil se personó en los municipios de las zonas afectadas para entrevistarse con los alcaldes y comprobar que no se habían sufrido daños.