David Movilla ha cambiado Leioa por Barakaldo esta temporada y este domingo se sentará por primera vez en competición en el banquillo fabril en el choque ante el Yugo Socuéllamos, correspondiente a la segunda jornada del Grupo II de Segunda B.

El técnico vasco prevé un partido muy igualado, en el que no quiere colgarse el cartel de favorito pese a jugar en casa ante un equipo sobre el que se deshace en elogios «porque ya el año pasado en la segunda vuelta fue uno de los mejores conjuntos», y que a su juicio «si la competición dura un mes más se hubiese metido entre los cuatro primeros».

A ello, añade que esta temporada «se ha reforzado con fichajes de nivel que le dan más empaque, mejorando su nivel competitivo», y que cuenta con la ventaja de que «mantienen el bloque del año pasado y tienen un año más de experiencia en la categoría», por lo que cree que «van a estar luchando por los puestos de cabeza seguro».

Enfrente, un Barakaldo del que afirma que «aún estamos en fase de construcción» y sobre el que, pese a su victoria por 0-2 en Toledo, no se muestra ni mucho menos contento por el partido de los suyos en el Salto del Caballo.

Para el técnico fabril, «hemos cambiado demasiado la plantilla, más de lo que nos hubiese gustado, porque sólo mantenemos a seis jugadores del curso pasado», por eso, no quiere ponerse «el cartel de favorito» ante un equipo que «está más conjuntado que nosotros».

El rendimiento del Barakaldo «ahora mismo es una incógnita» frente a un Socuéllamos que «mantiene el mismo bloque y el mismo entrenador».

El técnico gualdinegro sí apostilla que «el Barakaldo dentro de tres meses va a ser mejor equipo del que lo es ahora», pero reconoce que «los equipos conjuntados como el Socuéllamos parten ahora con ventaja».