El Balonmano Alarcos juega esta tarde (18.30 horas) su segundo encuentro consecutivo en el Quijote Arena. Su rival será el Cisne de Pontevedra, un conjunto implicado en la lucha por la permanencia y al que en la primera vuelta los ciudadrealeños ya ganaron con autoridad (30-37).
La principal consigna será la de ganar, pero visto el rendimiento de los pupilos de Javi Márquez hace sólo una semana frente al Grupo Covadonga (26-22), el grado de exigencia debe ser superior. Es decir, lo fundamental son los dos puntos, pero importante será también la forma de cómo conseguirlos.
En la última jornada la escuadra manchega completó un partido redondo y, de mantener esa línea, pelear por disputar la fase de ascenso a la Liga Asobal no es ninguna quimera. En cualquier caso, en el vestuario impera la prudencia y el mensaje del «partido a partido» que tan buenos resultados le está deparando.
Para este choque será baja por lesión Carlos Yuste, mientras que el cuerpo técnico tenía la duda del portero Javi de la Cruz, que atravesó durante la semana un problema vírico que le impidió entrenarse con normalidad.
Enfrente, el Balonmano Cisne llega a Ciudad Real con problemas en su portería por las lesiones de Toño Lafuente y Pablo Galán, aunque en las últimas semanas han concretado el regreso del extremo Pablo Domínguez, hermano de Quique Domínguez, entrenador del Teucro de Liga Asobal.
Igual que el Alarcos, el Cisne es un recién ascendido a División de Honor Plata y es el conjunto de procedencia de Andrés Sánchez, lateral derecho ahora en las filas alarquistas. La diferencia es que los gallegos siguen en la pelea por la permanencia y el Alarcos, con ese objetivo virtualmente conseguido, desea disfrutar de la competición y madurar de cara a futuros compromisos.
Javi Márquez quiere «seguir en esa línea, evitando picos de juego. Hemos tenido momentos muy buenos de juego, que luego se contrarrestaban con otros con pérdidas de balón que provocaban transiciones fáciles del rival. El último partido sí fue una victoria redonda y queremos tener ese control de juego, sin altibajos», explicó.
Sobre el Cisne, advirtió de los peligros del conjunto gallego: «Tienen una buena plantilla, profunda. Son jugadores habituados a militar en Primera Nacional y División de Honor Plata con distintos equipos gallegos y todos sabemos que Galicia es la cuna del balonmano español. Es cierto que no están teniendo demasiada fortuna y que en casa están mostrando un mejor rendimiento, pero en la última jornada de la primera vuelta ya fueron capaces de ganar a domicilio de forma solvente a La Roca».
DUROS COMPROMISOS. Tras este choque, el Alarcos rendirá visita al Valladolid y recibirá al Zamora, segundo y tercer clasificados, «partidos para disfrutar», según el entrenador manzanareño, que insiste en la igualdad de la competición y en que habrá sorpresas. «Contra equipos de la parte media-baja nosotros tenemos que sumar». Además, tuvo palabras de elogio para la afición y, en concreto, para la peña La Batalla, «que siempre nos da un plus. En pocos pabellones se ve una peña tan bulliciosa y que no para de animar».