La Guardia Civil de Puertollano cumplió con su cita anual en la iglesia parroquial de San Antonio de Padua, en la que honraron a su patrona, la Virgen del Pilar, con una solemne misa en la que agradecieron «la protección que ofrece la virgen a este cuerpo», al que le une ya un siglo de existencia. Durante la misa, los guardias civiles estuvieron acompañados por autoridades políticas de la localidad, como el alcalde, Joaquín Hermoso Murillo, y por representantes y miembros de los restantes cuerpos y fuerzas de seguridad que trabajan en la ciudad industrial. Después de la homilía, de aproximadamente una hora de duración, la actividad se trasladó al acuartelamiento de la localidad, donde los guardias civiles rindieron homenaje a sus compañeros caídos frente al monumento que les recuerda en sus dependencias en Puertollano.
Durante el homenaje a los caídos, el capitán jefe de la Compañía de Guardia Civil de Puertollano, Francisco Morena León, que ejercía como mando por primera vez en este acto en la que es su ciudad de origen, agradeció a todos sus hombres «el esfuerzo y el trabajo que realizan por el cuerpo» y afirmó que es «un orgullo tenerles a mis órdenes», reconociendo que había que redoblar esfuerzos «ante la coyuntura económica que estamos viviendo».

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