Vecinos, afectados y familiares de los dos fallecidos y de las personas que han sido víctima del brote de legionela detectado en Manzanares han creado una plataforma con el objetivo de hacer un seguimiento de la evolución del contagio y de los casos y canalizar posibles reclamaciones que serían gratuitas a través de este colectivo. Ayer expresaron su «indignación» por la falta de información sobre el origen del brote y de las medidas de precaución a adoptar por lo que han dado el paso para constituirse como plataforma y contactar con un despacho de abogados «especializado en reclamaciones por legionela, en casos colectivos». La iniciativa, que surgió a través de las redes sociales, cuenta ya con una veintena de integrantes.
Jacqueline González, una de las personas que han decidido formar parte de esta plataforma, es la hija de la primera víctima mortal que dejó el brote. Su padre, de 83 años, que sufría otras patologías, falleció el domingo 20 de diciembre y días más tarde perdió la vida otra persona de 73 años. En declaraciones a La Tribuna, González indicó que el objetivo de formar parte de esta plataforma no es otro que «hacer justicia y denunciar que algo así no vuelva a ocurrir». González lamentó la situación que se está dando las últimas semanas en Manzanares, «donde nadie dice nada, ni sabe nada», y apuntó que es «increíble que después de casi 20 días se desconozca aún cuál es el origen del foco y lo que tenemos que hacer los ciudadanos ante una situación así». Aseguró que detrás de la creación de la plataforma no está la intención de conseguir dinero, «porque la vida de una persona no tiene valor económico», sino «buscar responsabilidades y que los culpables paguen». «Es injusto que la población tenga que pagar por un descuido», aseveró. Con ese reto nace esta plataforma, que se prevé reunirse en los próximos días para estudiar con más detalle las medidas que pueden adoptar en el futuro, al mismo tiempo que reprocharon al Gobierno regional la ausencia de soluciones «ante la gravedad de la situación y que confíe en que remitan los afectados», unas explicaciones que, a su juicio, «no son las más tranquilizadoras para los ciudadanos que ya han oído la misma canción varias veces», añadió.
El brote de legionela afecta ya a 224 personas (dos más que en el recuento del lunes). Del total de afectados, dos han fallecido y 27 están ingresados, seis de ellos (uno más) en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de los hospitales de Ciudad Real y de Alcázar de San Juan.
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández, explicó en la rueda de prensa que ofreció este lunes en el Hospital Virgen de Altagracia de Manzanares que en los últimos días han ido descendiendo los nuevos casos, lo que a su juicio hace prever que a lo largo de esta misma semana se dejarán de registrar nuevos ingresos derivados por esta bacteria.
La Junta de Castilla-La Mancha aún no ha detectado los posibles focos de la bacteria, aunque todo apunta a que se trate de una fuente cercana de la estación de autobuses y de una torre de refrigeración de una empresa privada próxima al polígono industrial. Se prevé que los resultados se den a conocer hoy por parte de la Consejería de Sanidad.