El Sindicato de Policía Local exige medidas para regular el botellón

Diego Rodríguez
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Agentes municipales denuncian que en la noche del 27 de julio varios jóvenes les lanzaron cubitos de hielo tras intentar desalojarlos de la parte acerada de la zona de 'El Caminillo'

Imagen de los restos del ‘botellón’ del pasado 27 de julio en la zona del ‘caminillo’. - Foto: / LA TRIBUNA

El Sindicato de Policía Local de Castilla-La Mancha (SPL-CLM) denunció «la grave situación de inseguridad» que a su juicio vive el cuerpo municipal de seguridad en Puertollano con motivo del botellón de fin de semana, que en las noches de viernes y sábado de verano congrega «a cientos de jóvenes», la mayor parte de ellos en la zona conocida como ‘El Caminillo’ situada en las inmediaciones de la parroquia de la Virgen de Gracia.

En un escrito remitido a la alcaldesa de la ciudad industrial, Mayte Fernández, este sindicato asegura que la Policía Local se siente desprotegido legalmente a la hora de luchar contra el fenómeno del botellón al no existir una ordenanza municipal que lo regule. Asimismo, señala que la plantilla actual, que se encuentra por debajo de la ratio de agentes por habitante, no cuenta con efectivos suficientes para garantizar ni la seguridad de las personas que acuden a estos lugares los fines de semana ni la de los propios agentes que se desplazan para ello.

El detonate, según el SPL-CLM, tuvo lugar en la noche del pasado 27 de julio cuando una patrulla de cuatro policías locales recibió la «orden de desplazar a los cientos de jóvenes que celebraban el botellón» en la parte acerada del ‘caminillo’. Cuando los agentes intentaban trasladar a los asistentes a la parte no acerada (paralela a las vías del ferrocarril), varios jóvenes comenzaron a increpar a los funcionarios municipales, llegando incluso a arrojar cubitos de hielo contra los vehículos policiales. Finalmente, los agentes tuvieron que abandonar este lugar, según la Concejalía de Policía, porque recibieron una llamada que les ordenaba presentarse en otro lugar.

«Esta actuación no podía tener otro final -apunta el sindicato policial-, que supone de forma gratuita dejar ante cientos de personas una pésima imagen del cuerpo de Policía Local, así como de falta real de autoridad o capacidad, resultado de la falta total de planificación, de coordinación con otros cuerpos de seguridad y de la carencia de los recursos necesarios para llevarla a buen puerto ante un fenómeno social que se repite todos los fines de semana en la localidad».

Asimismo, el Sindicato de Policía Local de Castilla-La Mancha afirma que desde la jefatura del cuerpo municipal de seguridad se han podido emitir «órdenes presuntamente negligentes» y añade que para garantizar la seguridad en las zonas donde se celebra botellón se necesitaría «un fuerte dispositivo policial y no dos patrullas que encima no podían atender otros requerimientos en la ciudad». Además, también considera que la «falta de amparo legal» sobre el botellón dificulta la labor de los agentes policiales en este asunto.

ORDENANZA EN MARCHA. Por su parte, desde la Concejalía de Policía se asegura que los hechos ocurridos en la noche del pasado 27 de julio fueron «algo puntual» y lamenta la actitud de aquellas personas que en lugar de pasarlo bien se dedican a increpar a los agentes. «La Policía Local está haciendo un trabajo excepcional pese a los medios que tiene y siempre apuesta por una labor proactiva para evitar cualquier tipo de incidencias», apuntó el edil Jesús Fabián Caballero en declaraciones a La Tribuna, añadiendo que «los informes que tenemos de esa noche es que hubo lanzamiento de cubitos de hielo contra un vehículo de la Policía Local, pero nada más».

Por otro lado, el edil de Policía señaló que el Ayuntamiento de Puertollano trabaja en la elaboración de una ordenanza regulatoria del botellón que permita la realización de este fenómeno social «en condiciones de seguridad para sus participantes y con el menor impacto para los vecinos». Para ello, la Administración municipal quiere consensuar esta ordenanza con asociaciones de vecinos, colectivos juveniles y con los cuerpos y fuerzas de seguridad de la ciudad industrial.