Durante todo este verano, un grupo de personas ha salido prácticamente todos los sábados a la N-430, en las inmediaciones de Ossa de Montiel, para señalizar de manera manual que el camino hacia el Parque Natural de Las Lagunas de Ruidera se puede hacer por el municipio albaceteño. Ésta es una de las acciones que está llevando a cabo la asociación de empresarios de Ossa, que también está recogiendo firmas para que el parque pase a llamarse «Lagunas de Ruidera y de Ossa de Montiel», una reivindicación que el alcalde de Ruidera, Pedro Reinosa, asegura respetar «pero no compartir, como creo que no la comparte una gran mayoría de gente». Además, cree que es una campaña «absurda».

El alcalde de Ruidera no cree que la afluencia de turistas a uno u otro municipio «se deba al nombre del parque», algo que los empresarios albaceteños señalan al indicar que el turismo en Ossa se ha visto reducido «en un 50 por ciento». «La gente sabe cómo ir al parque y dónde está, y si se quedan más en Ruidera que en Ossa, será por otras cuestiones», explica Reinosa, que recuerda que el parque natural «está repartido en otros términos municipales como Alhambra, Argamasilla de Alba o Villahermosa».

Pedro Reinosa cree que la reivindicación «puede llegar a provocar un conflicto entre municipios», sobre todo una vez que la temporada de verano acabe «y los empresarios de Ruidera vean lo que una minoría de quince o veinte personas de Ossa de Montiel han intentado hacer, porque también es jugar con su trabajo».

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