Una vez asimilado el disgusto de la eliminación del play off de ascenso a Primera en la tanda de penaltis del tercer y definitivo partido, el FSD Puertollano ya se ha puesto a trabajar con vistas a la próxima temporada. Y lo primero que ha hecho es ofrecer las renovaciones a cinco jugadores, los cuatro 'de la casa', Nano, Borja, Dani Colorado y Barranquero, y el barcelonés Miki Soler, quien tuvo la mala fortuna de lanzar el balón al palo en el penalti que apeaba al equipo industrial en la eliminatoria contra el UMA Antequera. Así lo ha confirmado a 'La Tribuna' el presidente del club, José Gil-Castilla, que ya está realizando gestiones para diseñar la plantilla que competirán en Segunda División la próxima temporada 2018-2019. Un nuevo curso en el que el objetivo ya no será la permanencia, sino el ascenso a la Primera División.Además, Gil-Castilla confesaba su predisposición a presentar candidatura para ser reelegido como presidente en las inminentes elecciones en el club.