El pasado invierno fue benigno, ligeramente húmedo y con registros calcados al anterior. El que hoy empieza está por ver pero, según los pronósticos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), será menos frío y seco de lo normal. «Ese es el escenario más probable», puntualiza el delegado territorial de la Aemet, Ricardo Torrijo, a pesar de que hacer previsiones del tiempo a largo plazo es, en estas latitudes, bastante complicado. Así, se espera continuar con la tendencia de el otoño que se despidió a las 00.03 horas: calidez y humedad. Y es que hasta la fecha ha predominado la entrada de vientos atlánticos por encima de los fríos de origen continental o polar.

Las predicciones para los próximos días indican que el anticiclón de las Azores se ha instalado en el Atlántico y traerá nieblas matinales, alguna helada y tardes, probablemente, soleadas. «A medida que pasen los días, se irán acentuando los extremos y las temperaturas subirán menos a mediodía», exponen desde el Observatorio Meteorológico de Ciudad Real. Así, las máximas no pasarán de los diez grados.

Hasta ahora las lluvias han suavizado el ambiente dejando «una primera quincena de diciembre que en su conjunto ha sido cálida». Torrijo pone de relieve que «en la zona norte (Montes de Toledo) y en el oeste de la provincia (en el límite con Extremadura) ha llovido bastante este otoño»: un total de 146,3 litros por metro cuadrado, según los registros de la Aemet, cuando la media en el periodo comprendido entre los años 1970 y 2000 se mueve alrededor de los 110. Con respecto a las temperaturas, asegura que «han sido muy superiores a las normales, extremadamente cálidas, hasta tal punto que la anomalía ha sido superior a los dos grados centígrados». En Ciudad Real el otoño ha cerrado con una temperatura media de 17,6 grados, cuando el valor para ese periodo está en 15,1.

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