2016: un año para mirar hacia el futuro

I. Ballestero
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La Asociación Aspas pone a la venta su calendario solidario, en el que se plasman las posibles salidas profesionales que tienen los niños y niñas con problemas de audición

La Asociación de Padres y Amigos del Sordo (Aspas) de Ciudad Real ha puesto ya a la venta su calendario solidario para el 2016, en el que aquel que lo compre encontrará no sólo el detalle de todos los días que tendrá el año próximo, sino también imágenes en las que se muestra el futuro profesional que espera a los niños y niñas que encaran el día a día con problemas de audición. Así, de esta manera, la puesta a la venta de este calendario cumple un doble objetivo: por un lado sirve para recaudar fondos con los que financiar las actividades y servicios que esta asociación pone a disposición de los menores que sufren problemas de sordera, y por otro supone un alegato a las puertas abiertas a la integración que defiende la asociación desde sus inicios.

A la presentación del calendario asistió la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, que acompañó el alegato silencioso que supone el calendario con un mensaje muy claro sobre la integración. «Cuando hablamos de hacer una ciudad accesible siempre se nos viene a la cabeza el tema de la movilidad, pero lo cierto es que la accesibilidad es más que un rebaje o una rampa, porque significa abrir la ciudad plenamente a todos aquellos con capacidades diferentes, para que puedan tener una vida plena», explicó. Zamora puso a disposición de la asociación las dependencias municipales para la venta del calendario, y mostró su «total disposición» y la de su equipo de Gobierno «a colaborar en vuestra causa y en vuestras acciones», aseguró.

Al respecto del mensaje que recoge el calendario, la alcaldesa abogó por un «empleo digno» para las personas con capacidades diferentes, «porque a partir de ese empleo pueden construir una vida digna». Asunción Marchán, una de las componentes de la asociación y madre de un hijo afectado, reconoció que superar las dificultades «requiere medios técnicos y humanos», y destacó que este calendario «es el quinto año que se vende», a la vez que agradeció a los colaboradores que han hecho posible su publicación a través de su aportación desinteresada. «Es imprescindible la ayuda de todos», finalizó Marchán.