'Nudos' de Sáenz lleva los opuestos a la Escuela de Arte

D. F.
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La artista muestra una serie de obras caracterizadas por el uso de colores planos sin relieve ni textura

La artista plástica y cantante Victoria Sáenz expone desde ayer un durante las tres próximas semanas parte de su serie Nudos, con una selección de obras compuesta por cinco pareados, otros dos lienzos sin pareja y una serie de bocetos en pequeñas dimensiones de otras series realizadas con criterios similares que ayer se inauguró en la sala de exposiciones temporales de la Escuela de Arte Pedro Almodóvar.

La muestra es sorprendente por el efecto que producen sus parejas de cuadros, en cada par se aprecia la misma imagen repetida con los colores invertidos, pero también por la concepción de las obras como un contraste de colores planos, entre el negro y un crema que varía de un lienzo a otro o de una pareja de lienzos a otra, pero sin ninguna pretensión de mostrar volumen, textura, profundidad, a los que parece invitar una propuesta con ese título.

La propia Sáenz define su propuesta como «una visión muy primaria, básica, de concebir el cuadro como un retablo de grafismos, es como una tela atravesada de grafías», en la que lo más cercano podrían ser algunas caligrafías sin sentido y sin significado lógico concreto, que también se han expuesto como arte.

De esta forma, las siete obras, o 12, si se desdoblan los pareados, son un ejercicio de trazos que entran en el lienzo, se enredan y se envuelven sobre sí mismos para acabar saliendo por borde contrario de la tela.

Por el contrario, el juego de opuestos entre dos obras realizadas con el mismo trazo y colores invertidos, crea una desasosegante sensación de aislamiento para el espectador con la dualidad todo es lo mismo, todo es distinto.

Minutos antes de la inauguración formal de la muestra, la propia artista reconoció ante los medios de comunicación, que las obras seleccionadas para esta exposición son sólo parte de una serie más grande y en la que no todas las piezas cuentan con un ‘negativo’, como prueban los dos ejemplares situados en las paredes que separan las tres puertas de acceso a la sala, «pero lo tendrán», adelanta.

Con todo, la muestra para el centro de la plaza de la Provincia componen un estreno, ya que Sáenz matiza: «Estas obras se han elaborado específicamente para exponerlas aquí». Pero a la vez son la culminación «de un trabajo de hace tiempo», en el que también tiene su sitio el diseño por ordenador, puesto que la artista realizó sus bocetos con un programa informático, para hacer pruebas y descartar combinaciones antes de pasar a la realización de la propia obra con pintura acrílica sobre lienzo. «Pero aún me queda mucho material para seguir desarrollando esta serie».