Las sentencias pendientes de ejecutar en la provincia han experimentado en el último año y medio un descenso espectacular que, unido al trabajo desempeñado por los tres juzgados de lo Penal de la capital, ha merecido el reconocimiento del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que ha concedido el premio 'Calidad de la Justicia' a los jueces Almudena Buzón, Carmen Pedraza, Rosa María Angosto y José Luis Cobo, así como al Servicio Común de Ejecución de Ciudad Real por su «experiencia en conseguir una Justicia penal más eficaz» mediante «la cooperación y coordinación» de actuaciones entre la diferentes unidades de la Nueva Oficina Judicial y el uso de nuevas tecnologías.

Esa reducción de ejecutorias pendientes es fruto de la labor realizada por el juez nombrado a tal efecto, José Luis Cobo, que se encargó de esta tarea desde abril de 2013 hasta el pasado 11 de octubre, y que ha recibido la noticia desde su recién estrenado nuevo destino, el juzgado de lo Penal número 1 de Guadalajara.

Cobo se ha mostrado orgulloso por la concesión de esta distinción y ha señalado que el año y medio que permaneció en Ciudad Real como juez de ejecutorias descargó de este cometido a sus compañeros de los tres juzgados de lo Penal y les permitió señalar más juicios y sacar adelante otros muchos asuntos.

La juez Rosa María Angosto. - Foto: Tomás Fdez. de Moya El juez Cobo puede alardear de  haber reducido considerablemente el número de ejecutorias, a pesar del incremento registrado. «Se ha reducido a 1.013. Si había 4.000 cuando llegue al Juzgado el 12 de abril de 2013, a mi marcha el 11 de octubre he dejado 1.013, sin perjuicio del aumento en el número de entrada», explica en declaraciones a La Tribuna el juez Cobo desde su decimotercer destino.

 El magistrado, que fue designado en comisión de servicio para reforzar el servicio de ejecutorias penales de los tres juzgados de lo Penal, destaca la labor de los funcionarios, sobre todo aquellos que han trabajado con él, así como de sus compañeras de la carrera judicial y cuantos integran el Servicio Común de Ejecución.

 El juez Cobo, que fue responsable del Juzgado de Ejecutorias o, lo que es lo mismo, ejecutar lo juzgado en Ciudad Real, también hizo doblete en los 18 meses que ha estado en Ciudad Real. El pasado mayo se tuvo que hacer cargo  del Juzgado de lo Penal número 2 ante el traslado de la titular Almudena Buzón a la Audiencia Provincial de Ciudad Real en comisión de servicio. Así que desde entonces y hasta su marcha ha llevado la ejecución de las sentencias dictadas por los tres penales de la capital (unas 3.000 al año) y las riendas del número 2.

La otra juez reconocida con el mismo premio que sus compañeros, Carmen Pedraza, titular de Penal 1, pasó hace un par de meses a regir Social 2. La única que continua en su Juzgado, es Rosa María Angosto.

Más Eficaz. El presidente del TSJ, Vicente Rouco, fue quien propuso la candidatura de los tres penales para  los premios 'Calidad de la Justicia', iniciativa que recibió el apoyo de la Sala de Gobierno del Alto Tribunal castellano-manchego en septiembre de 2014.

El TSJ expresa su reconocimiento a la labor realizada durante el periodo previo y los años posteriores a la implantación de la Nueva Oficina Judicial para coordinar el trabajo en el ámbito de las competencias de los juzgados de lo Penal de Ciudad Real y el Servicio Común de Ejecución. La experiencia ha servido para dotar de «eficacia sobresaliente» a la jurisdicción Penal a menudo «excesivamente burocratizada y lenta».

Según el TSJ, las pautas de      coordinación del trabajo judicial en el ámbito Penal y la utilización de las nuevas tecnologías al servicio de los instrumentos, medios y normativa procesal existentes han dado como resultado mejoras en los tiempos de señalamientos y de resolución, así como la potenciación de la conformidad en los Juzgados de lo Penal de Ciudad Real».

El refrendo: más de 5.700 ejecutorias penales archivadas

El secretario coordinador provincial de la Nueva Oficina Judicial, Jesús Martín-Gil, expresa su «alegría y orgullo» por el reconocimiento del Poder Judicial al trabajo de los jueces de lo Penal y el Servicio Común de Ejecución. «Se premia la Justicia más eficaz», recalcó Martín-Gil, quien añadió que se «reconoce el trabajo y esfuerzo» de jueces, secretarios judiciales y funcionarios. «Por primera vez la Justicia Penal es refrendada y reconocida. Los datos lo avalan». A modo de ejemplo dijo que en 2013 se han archivado 5.700 ejecutorias penales. Las provisionales en 2012 fueron 2.072, frente a las 2.924 de 2013. Las definitivas en 2012 fueron 2.129 y 2.804 en 2013, apuntó tras destacar la labor de José Manuel Torres.