«Ahora y siempre feminismo» fue el grito con el que se cerró ayer la concentración en Ciudad Real capital contra el acuerdo andaluz entre PP y Vox porque «ningún pacto de gobierno puede eliminar los derechos que juntas y con tanto esfuerzo hemos conquistado». Más de medio millar de personas participaron en esta protesta en Ciudad Real que se sumó a las más de 60 convocatorias que hubo en España bajo la plataforma denominada ¡Ni un paso atrás!. Tomelloso, Puertollano y Alcázar de San Juan celebraron las suya propia, aunque fue en la capital donde participaron, por ejemplo, a título individual, concejales del equipo de Gobierno, la delegada de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha o la directora del instituto de la mujer.  

«Hoy nos movilizamos con motivo del debate de investidura que materializará el vergonzoso pacto de gobierno en Andalucía en el que se está negociando con nuestros derechos, usándolos como moneda de cambio y negando la incuestionable realidad de la violencia machista y racista», expusieron en el texto que ayer se leyó en toda España. Un documento en el que se recordaron como argumentos que «un 30% de las mujeres que han tenido una relación de pareja han sufrido alguna forma de violencia y un 38% de los asesinatos de mujeres en todo el mundo son cometidos por su pareja masculina». Además indicaron a quienes piden cambios en las leyes que «cada 5 horas una mujer es violada, mientras dichos violadores andan sueltos, la justicia patriarcal sigue culpabilizando a las mujeres». 

En el doble comunicado leído ayer se puso el acento en el «vergonzoso pacto en Andalucía» y también en que «la ley vigente de violencia de género es insuficiente» pero no por ello se puede negar la existencia de «una violencia patriarcal» que lleva al asesinato de mujeres. «Esta violencia, es la prueba más brutal de las múltiples desigualdades a las que estamos sometidas las mujeres», dijeron en la protesta, con el recordatorio de que para el movimiento feminista, el acuerdo alcanzado en Andalucía puede ser el inicio de una «involución» que se extienda por el país en los próximos meses, ante la que avanzan se encontrarán con una protesta en la calle para no dar «ni un paso atrás» como señala el lema de las protestas y la canción que se cantó al finalizar el feminismo. «El mundo se para si paramos», rezaba la letra de esa canción cantada a coro por las participantes, que completaron los manifiestos con el recuerdo a Simone de Beauvoir y su llamada a la vigilancia activa porque frente a cualquier avance en igualdad habrá una reacción patriarcal. «Que quede claro: en Andalucía y todo el territorio nos van a tener enfrente», dijeron ayer. 

Medio millar de personas, frente a la «involución» machista - Foto: Tomás Fernández de MoyaJunto a Feminismos Ciudad Real ayer participaron en la protesta otros colectivos que se han sentido atacados por los acuerdos andaluces como los colectivos Lgtbi representados por WADO y el Colectivo Espinas que reclamaba «Contra la ofensiva patriarcal capitalista, autodefensa feminista», que recordaron, en redes sociales, la sororidad con las andaluces al celebrar esta protesta por todo el Estado. Hay que tener en cuenta que en las protestas se apeló a la diversidad y al hecho de que la lucha feminista es también antiracista y antihomófoba. 

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